El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, recibió este lunes la tercera dosis de la vacuna contra la covid-19 en un acto público, con lo cual busca incentivar a los norteamericanos a que se inmunicen contra la enfermedad.
La dosis de refuerzo fue aprobada hace unas semanas por los CDC del país, pues se halló evidencia de que después de varios meses las vacunas empiezan a perder efectividad contra el virus, por lo que, entre las personas de mayor riesgo, como los adultos mayores, o quienes sufren de alguna comorbilidad, se optó por aplicar una nueva inyección de refuerzo.
El presidente afirmó que “esta es la pandemia de los no vacunados, por eso estoy avanzando con los requerimientos de la dosis en donde yo pueda hacerlo”, dijo Biden, quien agregó que su esposa Jill también se aplicará una nueva dosis en los próximos días.
Por su parte, la directora de los Centros para Control de Enfermedades, Rochelle Walensky, explicó que existe cierta confusión en el país sobre las personas que son aptas para recibir una nueva vacuna contra el virus.
“Hicimos lo posible para que las personas fueran elegibles, pero realmente tienen que identificar su propio riesgo individual y son responsables de su propio beneficio individual. Y reconozco que esto es confuso, y tenemos muchos recursos disponibles con su farmacéutico, con sus médicos, con sus departamentos de salud pública y con los CDC para consultarlo” dijo Walensky.
Cabe mencionar que en Estados Unidos, como en otros países del mundo, los nuevos picos de la enfermedad se han presentado principalmente por que millones de personas han optado por no recibir las vacunas contra la covid-19, por lo que se han hecho especialmente vulnerables al coronavirus, de hecho, cerca del 99 % de las muertes en ese país recientemente se han registrado entre quienes no las han recibido.
En este sentido, el presidente Biden y las autoridades sanitarias del país, han hecho un llamado constante para que quienes aún no se han vacunado lo hagan lo más pronto posible, con el fin de evitar que se siga expandiendo el virus y pueda llegar a mutar en nuevas cepas que sean aún más difíciles de contrarrestar o que sean inmunes a las vacunas que hay actualmente en el mercado mundial.
OMS critica terceras dosis
A pesar de la resistencia que ha mostrado la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otras entidades sobre la aplicación de una tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus, algunos país ya han anunciado que inyectarán a sus ciudadanos por tercera vez, para generar un refuerzo contra el enfermedad.
En principio, la crítica está relacionada a que muchos países pobres no han tenido acceso a la vacuna, pues no han logrado llegar ni siquiera al 10 % de población inmunizada totalmente, aunque hay otros que ni siquiera han empezado a vacunar, mientras que los países más ricos del mundo ya alcanzan 50 %, 60 % y hasta 70 % de inmunidad colectiva.
Por esta razón, para la OMS resulta inaudito que estas naciones sigan acaparando los sueros, cuando en múltiples ocasiones ha mencionado que no ve necesaria una tercera dosis de la vacuna, ya que los dos pinchazos han mostrado un alto grado de efectividad para evitar la muerte y la hospitalización por síntomas graves.
Sin embargo, las autoridades sanitarias de varios países, entre ellos Estados Unidos, China, Reino Unido, Japón y hasta Colombia, han decidido empezar a aplicar un nuevo refuerzo contra la covid-19, ya sea este o el próximo año.
El argumento de estos países es que aunque la vacuna muestra una robusta inmunidad contra el virus, lo cierto es que con el paso del tiempo empieza a caer la protección, por lo que es importante hacer un nuevo refuerzo, sobre todo, en los grupos poblacionales con mayor riesgo a sufrir un episodio grave de la enfermedad.