Las tensiones entre Estados Unidos y Rusia están más vivas que nunca. Si de por sí las relaciones ya estaban tensas tras las sanciones impuestas contra el Kremlin por el envenenamiento del líder opositor Alexéi Navalny, las cosas tomaron un tono aún más oscuro luego de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, arremetiera contra su homólogo ruso, Vladímir Putin, en una entrevista con la cadena de televisión ABC News. Durante la conversación, el entrevistador George Stephanopoulos le preguntó a Biden si pensaba que Putin era “un asesino”, a lo que el presidente respondió: “Mmmm, sí lo pienso”. Pero el tema no quedó ahí. Biden habló sobre el informe de los servicios secretos de Estados Unidos, el cual afirma que tanto Irán como Rusia, con autorización de Putin, buscaban influir en el resultado de las elecciones presidenciales, apoyando entonces al republicano Donald Trump. Asimismo, el mandatario se refirió a la llamada telefónica que tuvo con Putin al llegar a la Casa Blanca. “Te conozco y tú me conoces. Si averiguo qué sucedió, entonces prepárate”, le habría dicho el demócrata, y le advirtió: “Pagarán un precio” por sus afrentas y las consecuencias “las verán pronto”. Luego de la sonante revelación de Biden, el presidente ruso no tardó en contestar. Cual pelea de niños en el colegio, respondió a las acusaciones públicas de Biden con un “el que lo dice lo es”.

Frase

“Les vamos a meter la droga a los gringos en sus propias narices, y no se van a dar cuenta”,

fueron las palabras del presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, en una reunión con el narcotraficante Geovanny Fuentes, de acuerdo con la declaración de un testigo protegido durante el juicio por narcotráfico en Nueva York.

Cifra

8.800

niños migrantes tiene a su cargo actualmente el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos. La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza tendría otros centenares más, sin contar los que llegan a diario a la frontera con México.

¡A la cárcel!

Una jueza decretó cuatro meses de prisión preventiva contra la expresidenta boliviana Jeanine Áñez y dos de sus ministros, acusados de “terrorismo, conspiración y sedición” durante los hechos que llevaron a la renuncia y el exilio de Evo Morales en 2019. La tensa situación ha provocado protestas violentas en ese país.

Corea del Norte

Tratémonos pasito

En Corea del Norte no están muy contentos con el nuevo inquilino de la Casa Blanca. Kim Yo-jong, la temida hermana del líder norcoreano Kim Jong-un y alta funcionaria que maneja los asuntos intercoreanos, previno a Joe Biden. “Aprovechamos esta oportunidad para advertir a la nueva administración de Estados Unidos que se esfuerza por extender el olor a pólvora en nuestra tierra. Si quiere dormir en paz durante los próximos cuatro años, es mejor que se abstenga de causar un mal olor como un primer paso”, sentenció la empleada pública en referencia a la visita diplomática de altos mandos del gabinete estadounidense a la región. En efecto, el secretario de estado norteamericano, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, viajaron a Asia para hablar con los mandatarios de Japón y Corea del Sur sobre la situación en Corea del Norte.

Birmania

¡Resistencia!

La situación en Birmania es cada vez más crítica. Desde el golpe de Estado del primero de febrero, miles de personas han salido a las calles para manifestarse en contra del líder militar Min Aung Hlaing, y pedir la liberación de Aung San Suu Kyi. Naciones Unidas condenó la violenta represión de la junta militar de Birmania hacia los manifestantes, que ha dejado más de 138 muertos, entre ellos mujeres y niños. “Los asesinatos de manifestantes, los arrestos arbitrarios y las informaciones de tortura de prisioneros violan derechos humanos fundamentales y desafían claramente los llamamientos del Consejo de Seguridad a la moderación, el diálogo y el retorno a la vía democrática en Birmania”, señaló el jefe de la ONU, António Guterres. Por ahora, el regreso de la democracia parece lejano en el horizonte.

Atlanta

Racismo

La violencia racial no para en Estados Unidos. Robert Aaron Long, de 21 años, fue detenido después de asesinar a ocho personas en tres salones de masajes en Atlanta, Georgia. Dentro de las víctimas se encontraban seis mujeres de origen asiático, aunque el terrorista niega que lo haya hecho por motivos racistas. Long asumió la responsabilidad de los hechos, y el capitán Jay Baker, en conferencia de prensa, agregó: “Tenemos indicios de que tiene algunos problemas, potencialmente adicción sexual. Puede que haya frecuentado varios de estos lugares en el pasado”. Según los datos de la organización Stop AAPI Hate, 3.800 personas de la comunidad asiática en Estados Unidos sufrieron agresiones el año pasado, lo que representó un aumento de 35,7 por ciento con respecto a 2019.