Proteger los océanos del planeta será fundamental para luchar contra el calentamiento global, dijo el enviado estadounidense para el clima, John Kerry, en una entrevista este martes -28 de junio- a AFP, donde alertó que la guerra en Ucrania no es excusa para olvidar los objetivos medioambientales.

P: ¿Qué importancia tiene este encuentro en un año de cumbres sobre biodiversidad y cambio climático?

R: No puedes resolver el problema de la crisis climática sin abordar el océano, que es crítico como disipador de dióxido de carbono. Y no puedes resolver los problemas en los océanos sin abordar el clima, porque los gases de efecto invernadero acidifican y calientan el agua de los océanos.

Ya sea la iniciativa de corredores comerciales verdes; el memorando que el presidente (Joe) Biden ha firmado hoy para combatir la pesca ilegal, no reportada y desregulada en alta mar; o declarar un 30% de las zonas económicas exclusivas de cada país como área protegida; en cada paso del camino, hay vínculos entre el océano y lo que tenemos que hacer en materia climática.

P: El comercio marítimo supone un 3% del total de emisiones de gases de efecto invernadero. La Organización Marítima Internacional ha fijado el objetivo para 2050 de reducir estas emisiones a la mitad de su nivel en 2008. ¿Es suficiente?

R: No. Queremos emisiones cero en ese sector no más tarde de 2050. Eso implica objetivos compatibles para 2030 y 2040 con tal de alcanzarlo. Los siguientes meses son críticos.

P: La guerra en Ucrania ha supuesto un aumento del comercio de gas natural licuado (GNL). ¿No hay el peligro de crear una solución temporal que se convierta en un problema permanente para el clima?

R: Depende de qué reglas se implementen para la transición. No estamos a favor de construir infraestructura de GNL para 20, 30 o 40 años si no está preparada para hidrógeno verde o amoniaco. Tenemos que seguir la senda para llegar a neutralidad de carbono en 2050. Esto incluye el gas. Así que tendremos que ser capaces de capturar carbono y almacenarlo o usarlo.

Preparando la cumbre del G7 (26-28 de junio en Alemania), vi el lenguaje (de la declaración) que decía específicamente que cualquier reemplazo para el gas de Rusia debe mantenerse en los límites de los objetivos climáticos de Glasgow y París. Nadie habla de rebasarlos.

Ucrania no es una excusa para dar la espalda y no cumplir las promesas hechas. Si no reducimos suficiente entre 2020 y 2030, no puedes llegar a neutralidad de carbono en 2050, es así de simple.

P: Un ministro de un país caribeño me dijo esta mañana que en periodos de inflación y recesión, las prioridades climáticas se ponen al final. ¿Viene un tiempo difícil?

R: Sí. Vienen vientos en contra muy poderosos ahora. Pero hay que centrarse en lo importante. Si la transición económica recibe la inversión que necesita --y en eso trabajamos--, habrá un gran número de empleos, las cadenas de suministro mejorarán y la inflación bajará.

La crisis climática no desaparecerá. Si piensas que hoy es caro lidiar con el clima, espera hasta que veamos decenas de millones de personas que deben irse de algún sitio por el calor extremo, o a que la producción agrícola de un país implosione por completo debido a la sequía.

Nada de esto va a volverse más fácil. El daño de la crisis climática va a crecer durante siglos. Este es el aprieto en el que nos hemos puesto por no enfrentarnos a la necesidad de una energía limpia.

*Con información de AFP.