En medio de los esfuerzos que adelantan las autoridades del Estado de la Florida (Estados Unidos) para frenar la existencia de prácticas de ‘tratamientos’ para la afirmación de género, el pasado viernes se llevó a cabo una audiencia pública en la que se acordó iniciar el proceso que lleve al bloqueo de dichas prácticas en menores de edad.

Según detallan medios locales, esta decisión va en la misma senda de lo dispuesto por el gobernador estatal Ron DeSantis, quien actualmente toma un papel relevante en la política de Estados Unidos, siendo uno de los nombres que más peso toma de cara a la próxima nominación del partido Republicano a la presidencia de ese país.

La decisión emanada de la audiencia pública realizada en la localidad de Fort Lauderdale contó con la participación de los quince miembros de la junta médica del Estado, quienes le dieron luz verde al comienzo de un proceso que busca cerrar la puerta a tratamientos hormonales y de cirugías de reafirmación de sexo en personas que aún no ejercen plenamente sus derechos civiles. Esto es, menores y adolescentes.

Dichos procedimientos consisten en la aplicación de hormonas, y la realización de cirugías, con el objeto de corregir la llamada ‘disforia de género’.

En ese mismo sentido, la decisión adoptada por los expertos médicos radica en un acuerdo para solicitar a las personas que, ya en edad adulta, han decidido acceder a la práctica de esos procedimientos, estableciendo que, previo a su ejecución, se debe esperar un plazo de al menos 24 horas, además de la exigencia de un ‘consentimiento’, que deberá quedar por escrito.

Aunque la decisión fue recibida con agrado por algunos sectores de los asistentes a la llamada audiencia pública, otros sectores presentes en el espacio manifestaron sus voces de descontento y rechazo frente a la decisión emanada de los expertos.

Algunas de estas reacciones refieren a personas que, habiendo sido objeto de estos tratamientos, se manifiestan partidarios de ellos, advirtiendo que, en sus casos, tuvieron resultados positivos, siendo para el momento de la práctica menores de edad.

Esas voces, procedentes de las comunidades transexuales, apuntaron que hacían presencia en el lugar para “proteger sus derechos y la de otras personas que, en su misma condición, se han visto atropellados por la negación de estos procedimientos”.

En las declaraciones recogidas por medios internacionales, las voces disidentes de la decisión de la junta médica apuntaron que, en su momento, haber podido acceder a esos ‘tratamientos’ les sirivó para afrontar problemas de identidad que los tenían sumidos en la ‘depresión’.

Según precisaron medios locales, en medio de la discusión, y la disparidad de opiniones, algunas personas se exasperaron y debieron ser retiradas del espacio, debido a que sus reclamos ya estaban excediendo las barreras del respeto.

En ese mismo sentido, los medios internacionales que recogen la noticia han advertido que este espacio se abrió en medio de la agenda del Estado por solicitud del departamento de Salud de la Florida, advirtiendo que, en la práctica, existen algunos interrogantes aún frente a la efectividad y pertinencia de esos procedimientos.

Por lo anterior, algunos de los expertos convocados en la junta médica afirmaron que, ante la existencia de vacíos, su mejor opción era optar por respaldar las propuestas de establecer un marco regulatorio para ese tipo de procesos, lo que daría garantías a las partes.

No obstante, desde el sector científico, también hay quienes se oponen al nuevo proceso, advirtiendo que se trataría de una ‘maniobra política’, impulsada por el actual gobernador, quien se ha mostrado opuesto a los procesos de afirmación de género en niños y adultos.

Esta polémica también se ha visto enmarcada en disputas previas que, incluso, llevaron, según recogen los medios locales, a que el gobernador suspendiera al entonces fiscal del condado de Hillsborough. Sobre este, DeSantis recordó que se había manifestado en respaldo de los procedimientos de reafirmación de género, así como en rechazo a una ley estatal que prohíbe el aborto después de la semana 15 de gestación.

De Santis ha manifestado en el pasado su rechazo a los procesos de reafirmación de género, sentenciando incluso que debería tratarse como ‘delincuentes’ a los doctores que se presten para su realización.

Algunos de quienes se oponen a la terapia en adolescentes refieren el gran daño que se causa a los niños cuando estos aún no tienen claras sus decisiones de vida, apuntando el riesgo que ello representa, cuando, empezado el proceso, los menores se dan cuenta de que realmente sí se identificaban con su género real.

Contrario a ello, las voces disonantes de la prohibición apuntan a la pertinencia de los tratamientos tempranos para lograr mayor efectividad en ellos, evitando así traumatismos, cuando se busca reversar lo que la naturaleza misma va haciendo durante la pubertad, pero se está ya en etapas posteriores.

La disforia de género se refiere a casos de personas que admiten sentirse atrapadas en el cuerpo de un género contrario, al poseer una identidad de género difiere del sexo asignado al nacer.