El Parque Nacional de Virunga (PNVi) anunció el pasado martes la muerte de una gorila famosa por su historia y personalidad que se había convertido en uno de los atractivos de esa joya natural y turística del este de la República Democrática del Congo.
“Con gran pesar Virunga anuncia la muerte de la gorila de montaña huérfana Ndakasi, que residía en el centro de Senkwekwe desde hacía más de una década”, señala el comunicado del PNVi.
“El 26 de septiembre por la noche, después de una larga enfermedad, su estado se deterioró rápidamente y Ndakasi murió en brazos de su guardia y amigo de siempre, André Bauma”, añade.
“La vida de Ndakasi está bien documentada y su cálida personalidad ha aparecido en muchos programas y películas (...). También saltó a la fama en internet en 2019, cuando un selfi se volvió viral en el Día de la Tierra”, recuerda el PNVi.
Esta gorila de montaña nació en abril de 2007 y quedó huérfana con dos meses después de que unos milicianos mataran a su madre. Su estado vulnerable le impidió regresar al estado silvestre y vivió en un centro del PNVi donde ella, junto con otro gorila, Ndeze, fueron atendidos durante 11 años.
Situado en la frontera con Ruanda y Uganda, el parque de Virunga cubre 7.800 km2 en la provincia de Kivu del Norte (este).
La historia de Winston, el gorila que superó el coronavirus
Un gorila anciano se recuperó de un caso grave de covid-19 después de ser tratado con anticuerpos sintéticos de última generación, informó en meses pasados el zoológico de San Diego, California. El zoológico ya había anunciado el proceso del primate.
Winston, de 48 años, fue uno de varios gorilas de la manada del “San Diego Zoo Safari Park” que dieron positivo por coronavirus el 11 de enero, tras estudios basados en muestras fecales. Los veterinarios ahora están identificando a qué animales suministrarles el limitado tratamiento de vacunas que tiene el zoológico.
El contagio del primate fue el primer caso conocido de transmisión natural del virus a los grandes simios, y se sospecha que ocurrió por contacto con un empleado asintomático, a pesar del uso de equipo de protección personal.
La manada permaneció bajo observación después del diagnóstico, y algunos de los gorilas mostraron síntomas que incluían tos leve, congestión, secreción nasal y episodios de letargo. Debido a su avanzada edad, sus síntomas y la preocupación por las condiciones subyacentes, Winston fue examinado bajo anestesia.
Por otra parte, el año pasado, cámaras trampa registran una especie de gorila que se creía extinta.
Solo quedan unos 300 gorilas occidentales del Río Cross en el mundo, lo que los convierte en la subespecie más rara de gorilas, y de todos los grandes simios. A fines de junio, una cámara trampa ubicada en las montañas Mbe de Nigeria capturó una vista alentadora: un grupo de gorilas occidentales del Río Cross, incluidos varios bebés y jóvenes, pasando en frente de la cámara.
Esta es la primera vez que un grupo tan grande del gorila occidental del Río Cross (Gorilla gorilla diehli), incluidos bebés, ha sido fotografiado, según la Sociedad para la Conservación de la Vida Silvestre (WCS), una organización que trabaja con miembros de la comunidad local para protegerlos.
Antes de esto, solo había unas pocas imágenes de la subespecie en peligro crítico que provenían de cámaras trampa de Camerún y Nigeria. Estas incluyen imágenes de un gorila adulto al que le falta una mano, herida probablemente ocasionada por una trampa, un gorila espalda plateada solitario, así como una madre gorila con un solo bebé en su espalda.
Con información de DW.