La justicia británica rechazó el miércoles dejar en libertad vigilada al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, que lo había solicitado por temor a contraer el coronavirus en la prisión cerca de Londres donde está detenido, anunció su comité de apoyo.

Pese a la frágil salud de Assange, de 48 años, que en el pasado sufrió problemas pulmonares, el juez rehusó dejarlo salir con un brazalete electrónico, como propuso su abogado Edward Fitzgerald, lamentó la misma fuente. Según el comité de apoyo, unos cien miembros del personal carcelario de Belmarsch, donde Assange está recluido, están enfermos con síntomas de covid-19.

La justicia estadounidense ha pedido la extradición del australiano para juzgarlo por espionaje a raíz de la publicación en 2010 de decenas de miles de documentos confidenciales sobre las actividades militares y diplomáticas de ese país, en particular en Irak y Afganistán. De ser juzgado en Estados Unidos, Assange podría ser condenado a hasta 175 años de prisión. Tras celebrar cuatro días de vista de extradición hace un mes, la justicia británica debe seguir estudiando el caso a partir del 18 de mayo.