Tal y como se había previsto, la agencia reguladora de la competencia de Estados Unidos, la FTC, acudió este jueves a la justicia para tratar de bloquear la compra por parte de Microsoft de la firma de videojuegos Activision Blizzard, por 69.000 millones de dólares.
Si la operación de compra del exitoso editor de Call of Duty se concreta, “el fabricante de la Xbox obtendría el control de franquicias de primer orden, lo cual le permitiría perjudicar a la competencia (...) rechazando o degradando el acceso de rivales a sus populares contenidos”, señaló en un comunicado la organización antimonopolios estadounidenses.
La FTC argumenta que luego de adquirir un editor de videojuegos más pequeño, ZeniMax, casa matriz de Bethesda Softworks, Microsoft decidió reservarse la exclusividad de juegos como Starfield tras asegurar, sin embargo, a las autoridades europeas de la competencia que no tenía ningún interés en dejar de distribuir los juegos en consolas de competidores.
Activision, que cuenta con 154 millones de usuarios activos mensuales en el mundo y produce algunos de los juegos de video más emblemáticos, “es uno de los raros desarrolladores de videojuegos en el mundo que crea y edita videojuegos de alta calidad para múltiples aparatos, en particular las consolas de juegos de video, las PC y los aparatos móviles”, subraya la FTC.
“Eso podría cambiar si el acuerdo de compra es autorizado”, puntualiza la agencia.
“Continuamos pensando que este acuerdo ampliará la competencia y creará más oportunidades para los jugadores y los desarrolladores de juegos”, reaccionó por su parte un portavoz de Microsoft en un mensaje a la AFP en el que enfatiza que el grupo propuso a la FTC concesiones.
“Tenemos confianza total en nuestro caso y nos congratulamos por la oportunidad de presentarlo al tribunal”, añadió.
A comienzos de noviembre, la Comisión Europea (brazo ejecutivo de la UE) anunció la apertura de una investigación “en profundidad” de la propuesta de compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft, así como de los posibles efectos sobre la competencia en el segmento de juegos de video.
Xbox subirá los precios de sus juegos exclusivos en 2023
Microsoft ha anunciado que subirá los precios de sus títulos exclusivos first party para las consolas Xbox Series X|S a partir del próximo año, que pasarán a ser 10 dólares más caros.
El responsable de Xbox y director ejecutivo de Microsoft Gaming, Phil Spencer, adelantó a finales del pasado mes de octubre que la compañía se vería en la necesidad de aumentar los precios de sus productos.
Este cambio no solo tendría repercusión en las consolas de nueva generación que actualmente ofrece la marca (que actualmente tiene un precio cercano al 1.500.000 de pesos en el caso de la Xbox Series S y 2.700.0000 para Xbox Series X, sino también en sus videojuegos propios y su servicio de suscripción, Xbox Game Pass.
En primer lugar, la compañía comenzará a encarecer algunos de sus títulos. Concretamente, los de primer nivel (first party) de desarrollo propio cuyo lanzamiento está previsto para el próximo año, incluidos la próxima entrega de la saga Forza Motorsport, Redfall y Starfield.
En lugar de los 59,99 dólares habituales que cuestan estos videojuegos, los mencionados saldrán a la venta por 69,99 dólares (338.244 pesos colombianos), un aumento que se “refleja el contenido, la escala y la complejidad técnica de estos títulos”, tal y como ha comentado un portavoz de Microsoft a IGN.
Conviene recordar que cuando Sony anunció que incrementaría el precio de su consola PlayStation en agosto de este año, Microsoft, principal competidora de la compañía japonesa, insistió en que mantendría el precio de Xbox, pero no hizo referencia al resto de sus servicios hasta las recientes declaraciones de Phil Spencer.
*Con información de la AFP y Europa Press.