La cárcel San Pedro de Bolivia ubicado en La Paz, capital del país, ha sido frecuentemente noticia debido a problemas de organización y delincuencia al interior. Recientemente se convirtió de nuevo en noticia debido a que los guardias abandonaron la prisión, para que sea manejada por un consejo de criminales.
Condiciones
La Cárcel de San Pedro, al igual que muchas cárceles de Bolivia y de otros países en América Latina tiene algunas particularidades en su sistema de control y además sufre profundos problemas de hacinamiento y condiciones inapropiadas para la reclusión.
San Pedro es la prisión más grande de la Paz, y alberga aproximadamente a 3.300 reclusos, de alto grado de peligrosidad.
De acuerdo con el diario La Razón de Bolivia, aunque se albergan 3.300 reclusos en el penal, la capacidad real es para 300 personas, de los cuales el 70 % se encuentra en prisión preventiva.
“La capacidad de cuando se ha construido obviamente era de 300, pero a lo largo del tiempo, también San Pedro, si bien no ha ido creciendo en infraestructura a lo ancho, ha crecido en lo alto y eso ha aumentado la capacidad del recinto”, explica Franz Laura, director departamental de Régimen Penitenciario de Bolivia al mencionado diario.
Autogobierno
De acuerdo con el diario Daily Star en la cárcel de San Pedro recientemente los guardias abandonaron la prisión, para dar lugar a un tipo de gobierno propio de los reclusos en donde un consejo de criminales maneja todo lo que allí sucede.
El consejo de criminales establece las reglas y los castigos que deben sufrir quienes infrinjan las normas y la ejecución estaría dentro de los castigos posibles. La cárcel tiene en total 8 sectores y cada sector elige anualmente un delegado o líder y un tesorero. Los líderes imponen tareas a los demás reos, entre los cuales se encuentra la remodelación y el cobro de alquileres para la comunidad de prisioneros, dado que las celdas son arrendadas según el tiempo que dure la condena.
Castigos
Se han dado casos de delincuentes que son electrocutado, apuñalados o golpeado hasta la muerte por agresiones sexuales, incluso cuando son prisioneros de quienes se conoce un delito, que apenas ingresan a la cárcel.
Cuando los delincuentes de delitos sexuales llegan a la prisión se pueden formar multitudinarias turbas de linchadores que en algunas ocasiones terminan en la muerte de los prisioneros.
Familiares
Otra particularidad de la cárcel es que allí residen muchos de los familiares de los reclusos, una situación muy difícil de controlar para las autoridades carcelarias, cuando las hubo.
En 2013 una niña de 12 años que se encontraba dentro de las instalaciones quedó embarazada tras la violación de un grupo de hombres dentro de la prisión, dentro de los presuntos violadores habrían estado su padre, su tío y su padrino, quienes llevaban años recluidos. En ese momento la madre de la niña fue investigada también, bajo sospecha de permitir el supuesto abuso.
Cierre
El libro Marching Powder, es decir Polvo que se va en español, escrito por el australiano Rusty Young, relata sus experiencias durante una estancia de cuatro meses de visita en la prisión y fue publicado en el año 2003.
Young sobornó a los guardias para entrar a la cárcel y estuvo viviendo con un británico condenado por tráfico de cocaína en la misma celda, desde el momento de la publicación del libro la cárcel ha ganado más reconocimiento fuera del país. Hace unas semanas la Defensoría de Bolivia recomendó cerrar el penal de manera definitiva y construir un nuevo complejo penitenciario, acorde con las necesidades de la población de La Paz.