Rebeca Grynspan, secretaria general de la Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo (CNUCYD), indicó este miércoles en medio de una rueda de prensa que la crisis alimentaria actual podría generar una catástrofe global en el año 2023.

“El aumento de los costes energéticos y las restricciones comerciales en el suministro de fertilizantes procedentes de la región del mar Negro han hecho que los precios de los fertilizantes suban incluso más rápido que los de los alimentos”, dijo Rebeca Grynspan.

Además, la funcionaria de la ONU advirtió que si continúa la invasión de Rusia a Ucrania, “y los altos precios de los cereales y los fertilizantes persisten en la próxima temporada de siembra, la crisis actual podría extenderse (…) a otros alimentos básicos como el arroz”, agregando que la situación afectará, “a miles de millones de personas”.

Así mismo, reafirmó la postura de la ONU, en cuanto a que el mundo solo podrá responder de manera eficiente a la actual emergencia alimentaria con los productos procedentes tanto de Ucrania como de Rusia.

“Será fundamental restablecer la disponibilidad de fertilizantes, garantizar el acceso de los pequeños agricultores y controlar los suministros en todas partes durante los próximos 18 meses”, señaló.

Denuncian que bloqueo ruso en puertos de Ucrania está agravando la crisis alimentaria

La Cumbre de las Américas fue aprovechada por Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, para insistir en las toneladas de comida que se estarían perdiendo por el bloqueo ruso en el puerto de Odesa. En su intervención, recalcó que este tipo de acciones generaban una “crisis alimentaria global”.

Blinken no dejó pasar el momento para enviar un mensaje a la comunidad internacional, insistiendo en las limitaciones que estaría interponiendo Moscú al no dejar partir los barcos llenos de trigo que alimentan a millones de personas a nivel mundial, puntualizando que cada día aumenta el número de personas que sufren la hambruna.

“Hace tres años, aproximadamente, 100 millones de personas en todo el mundo se consideraban severamente inseguras de alimentos. Ahora, la agresión de Rusia contra Ucrania está añadiendo otros 40 millones de personas a los que padecen inseguridad alimentaria grave en todo el mundo. Esto está alcanzando proporciones históricas”, fueron las palabras de Blinken en medio de la cumbre.

Y agregó: “Hay 25 millones de toneladas de trigo que están en los silos de los puertos de Odesa, y 84 barcos llenos de grano que no podemos sacar por el bloqueo ruso”, mientras conversaba con Myron Brillant, quien es el vicepresidente ejecutivo y jefe de asuntos internacionales de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en medio de la Cumbre, haciendo énfasis en la gravedad del asunto.

Es de recordar que este lunes 6 de junio, Blinken también mencionó la crisis alimentaria que se estaría desatando, según él, por los bloqueos rusos, esta vez afirmando que Rusia se estaba “robando” los cereales ucranianos que estaban dispuestos para exportación, mismos que se encontrarían represados en los puertos. Indicó que Moscú los estaba revendiendo para su propio beneficio.

“Hay reportes creíbles (...) de que Rusia está robando las exportaciones de cereales de Ucrania para venderlas a beneficio propio”, dijo Blinken en una conferencia de prensa virtual sobre la inseguridad alimentaria. Agregó que Moscú está “acaparando sus propias exportaciones de alimentos también”, lo que está disparando los precios de trigo y otros cereales en el mundo y hace temer una escasez, añadió Blinken.

A modo de explicación, el secretario de Estado dijo que Rusia bloquea la salida de cargueros con cereales del puerto de Odesa en el mar Negro y acusó al presidente ruso Vladimir Putin de “chantaje” al buscar con esto un retiro de sanciones internacionales por la invasión a Ucrania. “Un bloque naval ruso en el mar Negro impide que la cosecha ucraniana sea encaminada a sus destinos normales”, recordó y concluyó: “todo esto es deliberado”.