El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, insistió en la creación de una política monetaria común para los países de Sudamérica, esto durante la cumbre que se celebró este martes en Brasilia, en la que se reunieron múltiples presidentes de la región, aceptando la invitación del mandatario brasileño.
Lula propuso así un camino “común” para la cooperación regional que permita “el desarrollo sostenible, la paz y el bienestar” de la población, poniendo como ejemplo el papel de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR) o la creación de una moneda latinoamericana común.
La idea de tener una moneda propia para los miembros del sur del continente es una propuesta antigua que, incluso, ha tenido algunos pasos en su ejecución en la era del difunto expresidente venezolano, Hugo Chávez, sin embargo, el proyecto no ha tenido una buena acogida por la mayoría de los países cada vez que se emite.
Pues bien, esta vez el presidente brasileño revivió el debate sobre los beneficios y contras de una política monetaria común para la región, justo en medio de su discurso de apertura de la cumbre, afirmando que con fondos recolectados en bancos de la región, se podría apoyar el desarrollo
“Fortalecer la identidad sudamericana en la política monetaria, a través de mejores mecanismos de compensación y de la creación de una unidad de transacción compartida para el comercio”, fue el llamado que hizo el presidente brasileño hacia sus homólogos en la región.
“Juntos somos la quinta economía mundial. Con una población de casi 450 millones de habitantes, somos un importante mercado consumidor”, agregó Lula, insistiendo en la importancia de unir esfuerzos y mantenerse en cooperación, tal y como se planteó con la creación de Unasur.
Una ‘hoja de ruta’ para la “integración”
El presidente de Brasil también aprovechó para proponer la construcción de una ‘hoja de ruta’ de “integración” para América Latina en un plazo de 120 días durante su discurso de inauguración de la cumbre sudamericana.
“Pienso que es fundamental crear un grupo de alto nivel que esté integrado por representantes de cada país. En base a lo que se decida hoy, habrá 120 días para presentar una ‘hoja de ruta’ para la integración de Latinoamérica”, destacó.
Si bien Lula ha destacado que la región ha avanzado en el buen camino en los últimos años, también recordó que los países latinoamericanos han abandonado “los canales de diálogo y los mecanismos de cooperación”, mientras que “grupos extremistas” han aprovechado para utilizar las plataformas digitales con el objetivo de “promover campañas de desinformación y discursos del odio.
“Infortunadamente, estos avances (en el continente) se han estancado en los últimos años. En Brasil, un gobierno negacionista (en referencia al expresidente Jair Bolsonaro) atacó los derechos de su propia población, rompió con los principios que rigen nuestra política exterior y cerró nuestras puertas a socios históricos”, afirmó, según ha recogido el diario Folha de Sao Paolo.
A la cumbre han asistido, entre otros, el presidente argentino, Alberto Fernández; el presidente de Chile, Gabriel Boric; el presidente de Colombia, Gustavo Petro, así como el presidente venezolano, Nicolás Maduro. La mandataria peruana, Dina Boluarte, se ha visto obligada a permanecer en su país debido a la inestabilidad política y social.
Un encuentro entre los líderes suramericanos no ocurría desde 2014, durante una cumbre del Unasur en Quito. La organización creada en 2008 por Lula (2003-2010) y el venezolano Hugo Chávez para contrarrestar la influencia norteamericana en la región, la Unión de Naciones Sudamericanas fue criticada durante años por algunos por tener un sesgo izquierdista. Y luego de triunfos conservadores en las urnas, inestabilidades políticas internas y las desavenencias entre países por la crisis venezolana, el bloque quedó prácticamente paralizado, sin presupuesto y sin sede.
Actualmente solo siguen en Unasur Bolivia, Guyana, Surinam, Venezuela y Perú -que nunca lo abandonaron-, además de Brasil y Argentina, que regresaron este año. Un nuevo mecanismo de integración “puede funcionar de manera diferente”, dijo Lula.
*Con información de Europa Press y AFP.