"Existe una base razonable para proceder con una investigación", declaró la fiscal principal de la Corte Penal Internacional, Fatou Bensouda, quien precisó que antes de abrir las pesquisas pedirá a la Alta Corte que dirima sobre qué territorio tiene jurisdicción, ya que Israel no es miembro del organismo, con sede en La Haya, Holanda.Bensouda explicó que ha pedido a los jueces abrir las pesquisas en Cisjordania, Jerusalén Oriental y la Franja de Gaza. Tras el anuncio, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu dijo que "la decisión de la fiscal de la Corte Penal Internacional ha transformado a la CPI en un arma política para deslegitimar al Estado de Israel", en un comunicado en el que descalificó la decisión y dijo que era un "día sombrío para la verdad y la justicia".
Las autoridades palestinas han venido reclamando que la CPI investigue la reacción de Israel a las protestas conocidas como la Marcha del Retorno, que comenzaron en 2018 y han dejado un saldo de más de 273 palestinos muertos y más de 16.000 heridos. El secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina, Saeb Erekat, calificó de "positiva" la decisión y señaló que representa un paso más hacia una investigación que podría "poner fin a la impunidad de los perpetradores" y que simboliza "un mensaje de esperanza" y de que la "justicia es posible".
En el mismo sentido se expresó el Ministerio de Asuntos Exteriores palestino en un comunicado: "El Estado de Palestina celebra este nuevo paso, que debería haberse tomado hace mucho tiempo (...), para llegar a una investigación después de casi cinco años largos y difíciles de examen preliminar".