Pese a que han pasado 27 años desde la muerte de la princesa Diana, todavía hay quienes recuerdan a la madre de los príncipes William y Harry como uno de los máximos referentes de la moda, que en su época se destacó no solo por su belleza, sino por su particular estilo tanto en peinados, como prendas de vestir, zapatos y accesorios, dejando una huella inolvidable en esta industria que se mantiene con el paso del tiempo.
Sin embargo, hubo una joya que utilizó en 1987 que fue catalogada como “extravagante” y que, a lo largo de la historia, ha despertado bastante curiosidad entre varios de sus admiradores porque ningún miembro de la realeza la volvió a usar, pese al furor que causó en aquel momento al ser un colgante único que fue fabricado en la década de 1920 por la joyería Garrard.
De hecho, varias de las joyas que la princesa Diana utilizó en sus diferentes eventos y apariciones públicas se convirtieron en parte de la colección de la familia real británica, mientras que otras de su colección personal pasaron a manos de sus nueras –la princesa Kate Middleton y Meghan Markle–, pero este colgante, a diferencia de los demás, terminó siendo subastado en enero del año pasado. ¿Por qué razón?
Esa es precisamente la duda que ha generado el motivo del destino final de este accesorio, usado en varias ocasiones por Lady Di, pero rechazado por todos los miembros de la realeza hasta que fue adquirido por Kim Kardashian en 2023.
Esta es la verdadera historia de la Cruz de Attallah de la princesa Diana
La joya que ha causado tanta inquietud entre los amantes del estilo que tenía la princesa Diana fue la cruz de Attallah, un colgante elaborado principalmente con amatistas cuadrados y diamantes circulares, de 5,25 quilates y con diseño floral de aproximadamente 136 x 92 milímetros, según el diario El País, que hizo parte de las joyas más especiales que tenía Lady Di.
No obstante, tras su muerte ningún otro miembro de la familia real británica volvió a portar este accesorio y únicamente volvió a ganar protagonismo en 2023, cuando fue subastado y Kim Kardashian se convirtió en su nueva dueña.
¿Por qué ningún miembro de la familia real volvió a utilizar la cruz de Attallah?
Debido al misterio que ha provocado que este valioso accesorio haya sido utilizado solo por Lady Di, se han creado un sinfín de versiones del mismo y entre estas, la que más ha tomado fuerza es la teoría que indica que sería “un accesorio maldito”.
A pesar de ello, en 2023 la revista ¡Hola! resolvió el enigma que se escondía detrás de la supuesta ‘maldición’ de la cruz de Attallah y en un artículo explicó que esta llamativa joya no le pertenecía realmente ni a Lady Di ni tampoco a la familia real británica, sino al fallecido Naim Attallah, exdirector del grupo Asprey & Garrard, quien la adquirió en 1980 y por su cercanía con la princesa Diana decidió prestarla para que la luciera.
“La princesa Diana y mi padre eran amigos y recuerdo que ella venía a menudo a verlo a la histórica tienda Garrard en Regent Street, donde estaba su oficina, y le pidió prestado el colgante en varias ocasiones, realmente le encantaba”, comentó Ramsay Attallah, quien la donó para una subasta en 2023.
Finalmente, la cruz de Attallah fue rematada por Sotheby’s el año pasado y se sabe que Kim Kardashian fue quien la compró por casi el doble de su valor, pagando 162.800 libras, es decir, unos 808.296.387 pesos colombianos al día de hoy, durante la puja de objetos aristocráticos ‘Real y Noble’, según menciona el diario El Mundo.