Más de 4,7 millones de refugiados ucranianos huyeron del país en los 50 días transcurridos desde el inicio de la invasión ordenada por el presidente ruso, Vladimir Putin, el 24 de febrero, según las cifras del Alto Comisariado de la ONU para los Refugiados (Acnur).
La Acnur ha registrado 4.736.471 refugiados hasta este jueves, 79.962 más que en el conteo del miércoles 13 de abril. Europa no ha registrado una ola de refugiados de esta magnitud desde la Segunda Guerra Mundial. Cerca del 90 % de las personas que huyeron de Ucrania son mujeres y niños, ya que las autoridades ucranianas no permiten la salida de hombres que estén en edad de combatir.
Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), cerca de 215.000 personas no ucranianas también huyeron del país, encontrando dificultades a veces para volver a sus países de origen. La OIM estima que unas 7,1 millones de personas han sido desplazadas al interior de su propio país.
En total, la guerra ha obligado a 12 millones de personas a huir de sus hogares, en un país que antes de conflicto tenía 37 millones de habitantes en los territorios controlados por Kiev, lo que excluye la península de Crimea, anexada por Rusia, y las zonas del este controladas por los separatistas prorrusos.
También se conoció que más de 870.000 ucranianos regresaron a sus casas desde el inicio de la guerra, entre ellos mujeres y niños, anunciaron este martes los guardias fronterizos ucranianos.
“Actualmente, entre 25.000 y 30.000 ucranianos por día regresan a su país. Contrariamente a lo que ocurría al principio, que se trataba sobre todo de hombres, ahora también hay mujeres, niños y personas de edad avanzada”, dijo el portavoz de los guardias fronterizos, Andriï Demchenko.
En medio de la revelación de esta escalofriante cifra de refugiados, Ucrania confirma la reapertura de los corredores humanitarios para evacuar a los civiles de las regiones golpeadas por el conflicto tras una suspensión que Kiev atribuyó a las violaciones de Rusia al cese el fuego.
La viceprimera ministra ucraniana Irina Vereshchuk indicó en un comunicado publicado en las redes sociales que nuevas rutas en el este y en el sur del país van a estar operativas, un día después del cierre de estas vías debido a que el Gobierno de Kiev estimó que eran demasiado “peligrosas”.
“Los corredores humanitarios en la región de Lugansk van a funcionar a condición de que cesen los bombardeos de las fuerzas de ocupación”, indicó Vereshchuk.
Las autoridades ucranianas han instado a la población de la zona del sudeste del Donbás a que se huyan al oeste ante el temor de una ofensiva a gran escala de los rusos para hacerse con el control de las regiones de Donetsk y Lugansk.
La ciudad de Kramatorsk, en el este de Ucrania, sufrió la semana pasada un bombardeo en una estación de trenes atestada de civiles que buscaban huir de la zona que dejó 50 muertos. Este ataque fue atribuido a las fuerzas rusas, pero Moscú negó su responsabilidad.
*Con información de AFP.
Por ser una noticia de interés mundial, todo el contenido sobre el conflicto entre Rusia y Ucrania será de libre acceso para nuestros lectores en todas las plataformas digitales de SEMANA.