El director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, criticó la forma en la que se están distribuyendo las vacunas contra el coronavirus en el mundo.

Según Adhanom Ghebreyesus, no es positivo que haya naciones que ya estén aplicando la tercera dosis de la vacuna contra la covid-19, mientras otras no han podido alcanzar la inmunidad de rebaño.

“Me complace que en Europa casi el 90 % de los Estados miembros hayan alcanzado el objetivo del 10 % y el 60 % de los países ya hayan alcanzado el objetivo del 40 %. Esta es la región con las tasas de vacunación más altas del mundo. Pero otras regiones necesitan su apoyo”, dijo el director de la OMS.

El funcionario volvió a insistir en que los países deben postergar la aplicación de la tercera dosis de la vacuna para que las demás naciones, sobre todo las de más bajos recursos, puedan llegar a la inmunidad de rebaño.

Y es que algunos países, como Francia o Israel, ya han empezado a administrar esa dosis de refuerzo para las categorías de población más vulnerables: los más ancianos (seis meses después de su segunda dosis) y las personas con el sistema inmunitario frágil.

De acuerdo con la OMS, el 80 % de las dosis administrativas, hasta el momento, (5.500 millones) se han realizado en países de ingreso alto y medio.

“El desarrollo y la aprobación de varias vacunas seguras y eficaces en un tiempo récord le ha dado al mundo una esperanza real de controlar la pandemia. Pero la impactante desigualdad en la distribución global de vacunas es una mancha en nuestra conciencia colectiva. Se han administrado más de 5.500 millones de dosis de vacunas en todo el mundo, pero casi el 80% de ellas se han realizado en países de ingresos altos y medianos altos”, dijo Tedros durante la sesión del Comité Regional del organismo para Europa.

¿Vacunas suficientes para frenar la pandemia?

A pesar de la necesidad de la vacunación masiva, la OMS ha advertido que las inyecciones no serán suficientes para frenar y ganarle la lucha a la pandemia del coronavirus.

La probabilidad de que la enfermedad siga siendo endémica es cada vez mayor. Por eso, Hans Kluge, director de la OMS en Europa, exhortó en rueda de prensa a “prever para adaptar nuestras estrategias de vacunación”, sobre todo en lo relativo a las dosis adicionales.

En mayo, Kluge dijo que “la pandemia terminará cuando hayamos alcanzado una cobertura mínima de vacunación del 70 %” de la población mundial.

Antes, aunque esta variante inicialmente detectada en India ya existía, “no había semejante emergencia de variantes más transmisibles y más virales”, explicó.

“Esto nos lleva al punto de que el objetivo esencial de la vacunación es sobre todo evitar las formas graves de la enfermedad y la mortalidad “, recalcó.

“Si consideramos que el covid seguirá mutando y continuará entre nosotros, como la gripe, entonces debemos prever cómo adaptar progresivamente nuestra estrategia de vacunación ante la transmisión endémica, y adquirir conocimientos muy valiosos sobre el impacto de las dosis adicionales”, agregó.

Según los epidemiólogos, parece poco realista alcanzar la inmunidad colectiva solo con las vacunas, pero estas son vitales para frenar la pandemia.

La vacunación también sigue siendo esencial “para reducir la presión sobre nuestros sistemas de salud que necesitan desesperadamente tratar otras enfermedades además del covid”, insistió Kluge.

Se estima que la variante delta, actualmente dominante, es un 60 % más contagiosa que la anterior (alfa) y el doble que el virus histórico. Y cuanto más contagioso es un virus, más sube el índice de las personas que tienen que estar inmunizadas para alcanzar la inmunidad colectiva y detener la epidemia. La inmunidad se consigue mediante las vacunas o contrayendo el virus.