En el marco de la apertura de la Conferencia de Biodiversidad (COP15), el secretario de la ONU, Antonio Guterres, calificó a la humanidad como un “arma de extinción masiva que trata a la naturaleza como un retrete, por lo tanto, va en camino al suicidio”. Guterres afirmó esto debido a que se refirió al daño del ecosistema biodiverso de parte de los humanos.

Desde el 7 hasta el 19 de diciembre se llevará a cabo la COP15; con más de 180 países, en la cual se reúnen para mitigar los daños causados por el calentamiento global, previniendo la llamada ‘sexta extinción masiva’ y lograr entre todos los 20 objetivos para mejorar las condiciones ambientales para el 2030. Prevén evitar las posibles pérdidas económicas si no hay un cambio, las cuales están tasadas en tres billones de dólares a partir de ese año.

COP15 | Foto: Eduardo Leite

Además de criticar el coste humano, el secretario se refirió a las multinacionales y su responsabilidad con el medio ambiente. Afirmó que a estas empresas solo les interesa el monto en sus cuentas bancarias, sin importar el daño que sus acciones le implique al planeta, convirtiendo al mundo en sus “juguetes de ganancias”. Al culminar su alocución, hizo un llamado a los representantes partícipes en la conferencia a abordar las raíces del problema ambiental, las cuales son “los subsidios perjudiciales, las inversiones mal dirigidas, los sistemas alimentarios insostenibles y los patrones más amplios de consumo y producción”.

En correlación con las palabras de Guterres, uno de los puntos claves para tratar en la COP15 es el futuro de la fauna y flora del planeta, yendo en picada cada vez más. A partir de los datos suministrados tres años atrás por la Plataforma Intergubernamental de Ciencia y Política sobre Biodiversidad y Servicios de Ecosistemas (IPBES), un millón de especies están en peligro de extinción, la tercera parte del mundo está en altas condiciones de degradación y paulatinamente se desaparecen los suelos fértiles. Todo esto consecuente de la contaminación.

Otros datos expuestos por el IPBES puntualizan que la producción humana es la responsable del 75 % de la afectación a la masa terrestre, 66 % de la pérdida de océanos y del 85 % del daño a humedales.

También se trató el tema de los plásticos, uno de los focos de contaminación, y la quema masiva de combustibles fósiles e incendios forestales, detonantes para el crecimiento del calentamiento global.

Objetivos para 2030

Desde el Marco Global de Biodiversidad pos-2020 hay pactadas ciertas acciones de parte de los países de aquí a siete años, luego de no lograr las metas Aichi de 2010, las cuales radicaban en disminuir la pérdida de biodiversidad durante la década. Para llegar esta vez a los objetivos, Elizabeth Mrema, directora del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB), sostuvo que “para que el clima triunfe, la naturaleza debe triunfar y por eso tenemos que tratarlo juntos”.

Las 20 metas para 2030 las denominaron ‘30x30′, entre las cuales están dejar el 30 % del planeta bajo una protección jurídica ambiental, superando el 17 % proyectado en 2010. Además, hay puntos en torno al perjuicio de la pesca y agricultura, la reducción del uso de pesticidas y la disminución de emisiones de carbono.

El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, agradeció a los invitados en escoger a Montreal como la sede del COP15 y de preocuparse por el ecosistema: “Como también pueden ver, Canadá es un lugar de libre expresión, donde los individuos y comunidades son libres de expresarse abierta y vehemente. Y les agradecemos por compartir sus puntos de vista”.

“Las dos próximas semanas no serán fáciles”, reconoció el ministro de Ambiente de Canadá, Steven Guilbeault, pero siente expectativa en que los ‘30x30′ se pueden realizar. Sin embargo, la ONU Campaign Nature criticó los dos primeros días de la conferencia, argumentando que no se está logrando resultados significativos e impactantes para mitigar los problemas.

La cumbre continuará hasta la próxima semana, donde se seguirá discutiendo el camino que deben tomar los países para mejorar el planeta.