En medio de la tensión que se vive en Oriente Medio por cuenta de las acciones bélicas que en los últimos días han enmarcado en conflicto palestino - israelí, con bombardeos y lanzamiento de misiles, que han dejado más de 24 víctimas mortales, desde la Organización de Naciones Unidas, se ha elevado este sábado, un ingente llamado al cese al fuego.
El llamado fue hecho precisamente por la relatora especial de la ONU para los Derechos Humanos en los territorios palestinos, Lynn Hastings, quien se ha referido a las acciones bélicas, como actos “inmorales, ilegales e irresponsables”, según declaraciones recogidas por medios internacionales.
La funcionaria pidió, a través de un nuevo llamado, que se ponga fin a las hostilidades, abogando por el respeto a la vida de los pobladores de las regiones afectadas por el cruce de acciones armadas, pidiendo que se prevenga que el número de muertos y heridos pueda aumentar en los terrenos conocidos como la Franja de Gaza, y demás áreas de Israel.
Por medio de un comunicado, la referida representante de la ONU en Palestina afirmó que la actual escalada armada no tiene otras implicaciones más que el recrudecimiento del ya complicado panorama que se vive en ese sector del mundo, pidiendo a los respectivos líderes de los bandos en pugna que cesen sus acciones armadas.
La funcionaria de la ONU también ha apuntado algunos daños colaterales de la confrontación, y la forma en la que estos atañen directamente a las poblaciones civiles, apuntando que, debido a los bombardeos y lanzamientos de misiles, el servicio de electricidad en la franja de Gaza debió ser suspendido, añadiendo que, además, la central eléctrica que provee del servicio a la zona, actualmente tiene problemas para operar, en tanto se ha quedado sin combustibles, lo que repercute directamente en la posibilidad de generar electricidad.
En el mismo sentido, la vocera de la Organización de Naciones Unidas lamentó que como parte de la actual pugna, también se viera comprometido el funcionamiento de las entidades prestadoras de servicio de salud, refiriéndose a los hospitales y puesto de salud, así como a otras instituciones que brindan servicios a la comunidad como los colegios, almacenes, y centros de recepción de refugiados o desplazados, los cuales ahora mismo se encuentran ‘en peligro’.
En el marco del llamado humanitario, necesario para hacer frente a la situación derivada de la confrontación armada, la ONU afirmó que es importante que los bandos en pugna dejen de obstaculizar los desplazamientos del personal que brinda ayuda médica a los afectados, así como el transporte mismo de heridos.
De conformidad con lo anterior, la ONU también expresó en su comunicado la necesidad de destrabar los obstáculos que se presenta para el transporte de alimentos y combustibles hacia las zonas que han comenzado a presentar desabastecimiento, esencialmente en la frontera de Gaza.
“Estoy gravemente preocupado por la continua y grave escalada de violencia en Gaza y sus alrededores entre los militantes palestinos e Israel”, twitteó la funcionaria.
Adhiriéndose a la voz de Lynn Hastings, también se pronunció otra alta funcionaria de la ONU para la defensa de los Derechos Humanos en la región, Francesca Albanese, quien rechazó los recientes hechos; escalada que ya deja más de 20 víctimas mortales, afirmando que las labores de sobrevuelos y ataques ‘intimidatorios’, buscan ‘disuadir’ una respuesta por parte de las autoridades palestinas tras la aprehensión de uno de sus líderes; Bassem al Saadi, capturado en días pasados en la región de Cisjordania
En ese sentido, la relatora de la ONU, afirmó que, a la luz del Derecho Internacional Humanitario, el uso de la fuerza solamente está permitido en el ejercicio de labores de ‘defensa propia’, por lo que lo evidenciado actualmente en el conflicto palestino- israelí no puede ser visto como tal, sino, por el contrario, como agresión evidente.