Daniel Sancho, acusado de haber asesinado al médico colombiano Edwin Arrieta, se declaró culpable de los cargos de asesinato con premeditación y ocultación de pruebas.
El español, de 29 años, ya se encuentra detenido de manera provisional en la cárcel de Koh Samui y relató ante las autoridades de Tailandia su acción directa en el asesinato y posterior desmembramiento del cirujano colombiano.
Mientras el confeso asesino permanece en el centro carcelario hasta el juicio, se prevé que podría enfrentarse a una pena de 15 años, pero también a cadena perpetua o, en el peor de los casos, a una condena de muerte.
Según recopilaciones de medios internacionales, como El País, de España, Sancho “es consciente de lo que hizo”. Tras el análisis de la confesión, un juez de la isla tomó la decisión de llevarlo a la cárcel.
El mismo medio europeo detalló que Khun Anan, abogado de Sancho, manifestó que el acusado está “relajado”. Asimismo, lo más probable es que en la cárcel donde se encuentra el cocinero español no sea su destino final, sino que sería trasladado a una prisión de Bangkok.
De manera conjunta, se prevé que el periodo de detención del joven hasta el inicio del juicio pueda ser por semanas, incluso meses.
En dicho periodo, la Policía de Tailandia deberá dar su informe respecto al caso de homicidio del cirujano colombiano de 44 años, proveniente de Lorica, en el departamento de Córdoba. Es pertinente recordar que el acusado ya se había declarado culpable hace unos días en la comisaría de Koh Phangan.
Entretanto, la periodista española Sandra Barneda leyó un comunicado mediante la televisión en el que relató que “las manifestaciones que pueda estar haciendo Daniel son bajo una situación de presión emocional difícil de controlar”.
Se prevé que una de las razones por la que Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho, declaró la culpabilidad del caso sería debido a las pruebas en su contra, ya que son evidentes en medio de la investigación.
Descripción del caso
Daniel Sancho, chef español de 29 años, compartió con Arrieta en un hotel en la isla de Koh Phangan en Tailandia; Sancho habría llegado al país el pasado 31 de julio.
Arrieta era un cirujano plástico, oriundo de Lorica, Córdoba, en Colombia; ambos se hospedaron en un hotel en la isla de Koh Phangan en Tailandia.
Los dos hombres compartieron en restaurantes y zonas turísticas de Kih Phangan, pero en algún momento, el colombiano desapareció y, de hecho, fue Sancho quien lo reportó como desaparecido el pasado jueves 3 de agosto.
Las autoridades iniciaron la búsqueda sin mayor éxito en las primeras horas del reporte; sin embargo, gracias a unos recolectores de basura comenzó a revelarse la noticia del escabroso asesinato. Los recolectores habrían hallado una bolsa negra con intestinos y una pelvis en el basurero de Koh Phangan.
El hallazgo fue reportado a la Policía, que llegó al sitio. Tras una inspección, las autoridades encontraron otra bolsa con piernas; los restos fueron llevados hasta el hospital de la isla donde determinaron que la identidad de la persona correspondía al médico colombiano.
Conjuntamente, entre los detalles del caso, el chef fue algo contradictorio en las versiones que, hasta el momento, ha dado sobre el crimen. Inicialmente, confesó el asesinato durante un interrogatorio, después de que fue él mismo quien reportó la desaparición.
Luego aclaró que Arrieta habría muerto porque él le golpeó la cabeza y Arrieta finalmente no despertó, a pesar de sus esfuerzos para que reviviera. Según el testimonio, Sancho golpeó a Arrieta porque este quería tener sexo con él y el joven se negó, y en un ataque de ira ante la petición del médico, el joven lo golpeó y este quedó inconsciente.
Según el Bangkok Post, el joven asistió a la fiesta de luna llena con dos mujeres que conocía y que se encontraban en el hotel. Solo después de eso, reportó la desaparición de Arrieta a las autoridades.
De acuerdo con el diario El País, de España, Sancho aseguró que él cometió el crimen porque Arrieta lo presionaba constantemente para que fuera su pareja.
Por ahora, queda por esperar cuáles serán las decisiones de la justicia internacional.