El papa Francisco afirmó este domingo al pueblo cubano que está “cerca” en “estos momentos difíciles” e hizo un llamamiento al “diálogo” y a la “paz” tras las históricas protestas contra el Gobierno comunista que sacudieron la isla hace unos días, en un mensaje en su tradicional Ángelus en el Vaticano.
“Estoy también cerca del querido pueblo cubano en estos momentos difíciles, especialmente de las familias que más sufren”, dijo Francisco desde la ventana del palacio apostólico en la plaza San Pedro, en su regreso tras diez días hospitalizado a raíz de una operación de colon.
“Rezo al Señor para que lo ayude a construir en paz, diálogo y solidaridad una sociedad cada vez más justa y fraterna”, agregó el papa argentino, según la transcripción oficial al español de su mensaje pronunciado en italiano.
Miles de personas salieron a protestar el 11 de julio a las calles de 40 ciudades y pueblos de Cuba, castigada por la peor crisis económica en 30 años.
Durante las protestas, que en ciertas partes continuaron el lunes, un hombre de 36 años falleció cuando participaba el lunes en una protesta en el humilde barrio La Güinera, en la periferia de La Habana, donde hubo enfrentamientos entre manifestantes y policías. El Ministerio del Interior dijo que “lamenta el fallecimiento”.
Según Amnistía Internacional (AI), durante las protestas hubo represión de las autoridades cubanas, pues se registraron detenciones, disparos y ataques contra la prensa. En el marco de las manifestaciones hubo denuncias contra un centenar de personas, incluidos periodistas independientes y activistas de la oposición, que han sido detenidos.
El viernes, la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, pidió la liberación urgente de todos los detenidos en la isla e instó al diálogo entre el Gobierno comunista y ciudadanos, al tiempo que llamó a levantar las sanciones contra la isla caribeña.
“Insto al Gobierno a que aborde las demandas de los manifestantes mediante el diálogo y a que respete y proteja plenamente los derechos de todas las personas a la reunión pacífica y a la libertad de opinión y expresión”, pidió Bachelet en un comunicado.
“Estoy muy preocupada por el presunto uso excesivo de la fuerza en contra de manifestantes en Cuba y el arresto de un gran número de personas, entre ellas varios periodistas”, expresó Bachelet.
“Es especialmente preocupante que entre ellas haya personas presuntamente incomunicadas y personas cuyo paradero se desconoce. Todas las personas detenidas por ejercer sus derechos deben ser liberadas urgentemente”, agregó.
Las manifestaciones, históricas en la isla, provocaron un primer gesto del Gobierno: la autorización para que los cubanos ingresen al país alimentos, productos de higiene y medicamentos, sin límite de valor y pago de aranceles, hasta finales de año, una medida buena, pero insuficiente, según expresaron numerosos ciudadanos.
Bachelet reiteró su llamado “al levantamiento de las sanciones sectoriales unilaterales, dado su impacto negativo en los derechos humanos, incluido el derecho a la salud”. La responsable también pidió que se restablezca plenamente el acceso a internet y a las redes sociales en el país.
Desde Washington, el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, se hizo eco del planteo.
“Nos sumamos al pedido de la Alta Comisionada Bachelet para que la dictadura cubana libere a todas las personas detenidas y cese la represión”, dijo en su cuenta de la red Twitter.
“Cuba necesita democracia y libertad para desarrollar su economía y que su gente viva con dignidad”, añadió.
Con información de la AFP.