Las que tradicionalmente eran consideradas unas elecciones para aprobar o desaprobar al partido en el poder, Trump las convirtió en un referendo sobre su presidencia. En diferentes manifestaciones a su favor, dijo a la multitud que votara como si su imagen apareciera en la parte superior del tarjetón, advirtiendo que sus planes y los de su partido estaban en riesgo. Pódcast Semana Internacional: Elecciones legislativas en Estados Unidos: un referendo para Trump En ese camino se propuso poner en las noticias temas como la migración con el fin de atacar, con su ya habitual retórica incendiaria, todo lo que pasaba más allá de la frontera sur estadounidense. Pronunció discursos que atrajeron a multitudes en los que se describió a sí mismo como un nacionalista y convirtió una caravana de inmigrantes centroamericanos en el tema a discutir. Los demócratas lograron superar el número mágico de escaños en la Cámara (218) y eso es ya suficiente poder para cerrarle la puerta a algunos caprichos de Trump. Como dijo durante un discurso la líder demócrata Nancy Pelosi, “más que de demócratas y de republicanos, ahora se trata de restaurar el control y el equilibrio constitucional ante la administración Trump”. Sin embargo, los republicanos incrementaron su mayoría en el Senado asegurando su capacidad de confirmar o desestimar  incluso a los candidatos que en un eventual impeachment judicializarían a Trump. Estos son algunos temas que podrían cambiar de rumbo con el nuevo Congreso. Le recomendamos: Alexandria Ocasio-Cortez, la latina que se convirtió en la mujer más joven en el Congreso de EE.UU. El muro en la frontera con México En julio de 2017 la Cámara de Representantes aprobó los primeros 1.600 millones de dólares para el famoso muro que según firmas constructoras, podría llegar a costar hasta 25.000 millones. Pese a que Trump pidió en varias ocasiones más presupuesto para terminarlo, el Senado nunca aprobó más dinero para ese fin. Ahora los demócratas esperan acabar de una vez por todas con esa fantasía, teniendo en cuenta que solo en seguridad para los prototipos del muro, los contribuyentes de ciudades como San Diego han pagado cerca de 2,3 millones de dólares. La trama rusa Hasta ahora, una mayoría demócrata en alguna de las Cámaras era el ingrediente que faltaba para abrir una investigación en el Congreso sobre la posible colusión entre la campaña de Trump y el gobierno ruso en las elecciones presidenciales de 2016. Aunque ese posible proceso de destitución puede no tener mayor futuro en el Senado, Washington podría vivir días de tensión política si es que el fiscal especial Robert Mueller, quien dirige la investigación, presenta pruebas concretas que los demócratas puedan utilizar. En contexto: La lucha entre Trump y Mueller se intensifica en el marco de la investigación rusa La inmigración Los demócratas acudieron en masa a la votación a mostrar su desaprobación a la retórica incendiaria y divisiva en la que Trump se regodeó las semanas previas a las elecciones. Los comentarios venían por cuenta de la caravana migratoria que desde septiembre se abre paso por México y cuenta con miles de migrantes centroamericanos, la mayoría hondureños. Esta vez los cuatro estados fronterizos con México se repartieron entre ambos partidos: los republicanos se quedaron con Arizona y Texas, mientras que los demócratas pisaron fuerte en California y Nuevo México. El veto musulmán En septiembre del año pasado, Trump impidió por decreto el ingreso de ciudadanos de cinco países de mayoría musulmana (Irán, Libia, Somalia, Siria y Yemen), así como de Corea del Norte, y también de algunos funcionarios diplomáticos de Venezuela. Muchos vieron en ese movimiento un capricho más del magnate, obsesionado por detener la migración hacia su país. Los demócratas podrían darle ahora un giro de 180 grados a la situación. Más ahora que cuentan con el apoyo de Ilhan Omar (Minnesota) y Rashida Tlaib (Michigan) quienes se convirtieron en las dos primeras mujeres musulmanas en ser electas al Congreso de Estados Unidos. Puede leer: Estados Unidos elige un Congreso dividido y Trump canta victoria