Los disturbios urbanos causaron “al menos 20 millones de euros en daños”, para los transportes públicos de la región de París, según un balance publicado este lunes por la autoridad regional de ese sector.
En esta suma se incluyen “los autobuses incendiados, un tranvía incendiado, dos tranvías dañados y el mobiliario urbano vandalizado”, precisó el organismo, Île-de-France Mobilités (IDFM) agencia de noticias AFP, confirmando una información del diario Le Parisien.
En total, se incendiaron 39 autobuses en toda la región parisina (Île de France) desde que empezaron los disturbios, según a la entidad.
Señaló que hay que contar unos 350.000 euros por autobús, precisó la autoridad regional de transportes.
Desde hace días y por precaución, la circulación de autobuses y tranvías en la región parisina se interrumpe a las 9:00 p. m., una medida que también se aplicará este lunes, recordó IDFM.
Los disturbios estallaron el 27 de junio por la noche tras la muerte de Nahel, un joven de 17 años a quien un policía le disparó a quemarropa durante un control de tránsito en un suburbio del noroeste de París. Un vídeo captó el momento del drama.
Entre tanto, el Ministerio del Interior francés tiene ya registrados 3.200 arrestos durante las protestas, una cifra que alcanza ya al de las masivas protestas de 2005, también a raíz de la muerte de dos jóvenes, con la salvedad de que ahora se ha llegado a esta cifra en apenas seis días en lugar de en tres semanas.
Aunque la noche del domingo al lunes fue relativamente más tranquila y ha habido algo más de 150 detenciones, el ministro del Interior, Gérald Darmanin, confirmó que se ha llegado ya a un nivel de arrestos “sin precedentes”.
De las 3.200 personas detenidas, “un 60 %” no tienen antecedentes policiales “y no han sido nunca objeto de ningún control”. En cuanto a la edad, la media ronda los 17 años, con casos incluso de menores de doce o trece años vinculados a incendios, ataques contra las fuerzas de seguridad o contra las instituciones públicas.
En las cinco noches de protestas, el Gobierno ha contabilizado 5.000 vehículos y 10.000 papeleras incendiados, 1.000 inmuebles dañados, 250 ataques contra comisarías y más de 700 policías o gendarmes heridos.
El ministro del Interior prometió que las autoridades seguirán “muy movilizadas” con miras a “restablecer el orden”, un compromiso lanzado en reiteradas ocasiones en los últimos días por las autoridades ante acciones que, en palabras del presidente, Emmanuel Macron, son “injustificables”.
El dispositivo de seguridad de los últimos días ha contemplado el despliegue de 45.000 policías y gendarmes.
También este lunes han tenido lugar en distintas ciudades de Francia, entre ellas París, concentraciones de apoyo al alcalde de L’Hay-Les Roses, Vincent Jeanbrun, contra cuya vivienda se lanzó el sábado un coche en llamas. La alcaldesa de la capital, Anne Hidalgo, ha reclamado “una explosión de respeto” como contrapeso a la violencia, informa Franceinfo.
Entretanto, el agente que efectuó el disparo que le costó la vida a Nahel, y cuya actuación ha sido puesta en duda por las autoridades, permanece en prisión provisional como sospechoso de un delito de homicidio.
Nahel viajaba a bordo de un vehículo junto a otras dos personas, pero hasta este lunes no ha reaparecido el tercero de los ocupantes.
Esta persona, cuya identidad no ha trascendido, compareció ante la Inspección General de la Fiscalía Nacional (IGPN) para declarar en calidad de testigo de lo sucedido, según fuentes judiciales citadas por Le Figaro.
Un millón de euros recaudados para apoyar a policía que baleó a un joven en Francia
Un fondo de apoyo a la familia del policía que desencadenó una oleada de disturbios recaudó este lunes más de un millón de euros.
A las 2:00 p.m. (hora local) de este lunes, se contaba con unas 50.600 donaciones por un monto total de 1,002 millones de euros.
“Apoyo para la familia del policía de Nanterre, Florian M. que hizo su trabajo y que está pagando un alto precio”, dice el texto que acompaña el bote, creado por Jean Messiha, un exvocero del político ultraderechista Éric Zemmour.
El hecho de que la recolección de fondos haya sido organizada por “una persona cercana a la extrema derecha (...) no contribuye” al “apaciguamiento”, consideró por la noche la primera ministra, Elisabeth Borne.
La funcionaria añadió que, si fuera necesario, corresponderá a la justicia pronunciarse sobre la legalidad de este fondo.
La creación y el éxito de la colecta provocó la indignación de la oposición de izquierda. La diputada Clémence Guetté denunció en su cuenta Twitter “una indecencia y un horror absoluto”.
“¿El mensaje? Vale la pena matar a un joven árabe”, condenó la eurodiputada francesa de izquierda Manon Aubry, que pidió la supresión del bote creado en el sitio GoFundMe.
Un portavoz del sitio indicó a AFP que el apoyo estaba “conforme” a sus reglas, ya que los fondos “se abonarán directamente a la familia en cuestión”, que figura como “beneficiaria”.
En el sitio Leetchi, otro bote en apoyo a la familia del policía recaudaba por su parte casi 60.000 euros, mientras que otro en apoyo a la familia de Nahel contaba con casi 200.000 euros.
* Con información de AFP y Europa Press