Una de las noticias más impactantes en Estados Unidos en esta semana fue una nueva resolución tomada por la Corte Suprema de Justicia referente a la raza, tema que ha sido la mayor obsesión del país a lo largo de su historia.
Por 6 votos contra 3, el máximo tribunal judicial del país decidió suprimir que se siguiera teniendo en cuenta la raza como un factor en las admisiones en las universidades, lo que era conocido comúnmente como discriminación positiva.
Según la corte, ello era violatorio de la cláusula sobre protección igualitaria de la Constitución.
El fallo ha sido visto como un duro golpe a las políticas de acción afirmativa en las principales universidades del país, como Harvard, que buscaban crear un campus más “diverso”, al favorecer a los estudiantes negros e hispanos sobre los blancos y los asiático-estadounidenses.
Entre los críticos del pronunciamiento se encuentran los activistas, pero también los demócratas, empezando por el presidente de la nación, Joe Biden, quien por estos días ha cuestionado esa y otras decisiones del tribunal, cuya mayoría es conservadora.
“Caso tras caso, incluso recientemente, hace solo unos años, en 2016, el tribunal afirmó y reafirmó la visión de que las universidades podrían usar la raza, no como un factor determinante para la admisión, sino como uno de los factores entre muchos para decidir a quién admitir”, señaló el mandatario durante una rueda de prensa.
Así mismo, consideró que “la corte una vez más se alejó de décadas de precedentes” y que está fuertemente en desacuerdo con ese veredicto. De igual modo, opinó que este “no es un tribunal normal”.
Pero a sus detractores no les quedó difícil encontrar cómo desvirtuar esa opinión de Biden valiéndose del pasado.
A muchos, de inmediato, se les vino a la mente uno de los episodios más álgidos de su campaña y fue el rifirrafe que tuvo con su actual vicepresidenta, Kamala Harris, quien le reprochó que, como congresista, lideró la lucha en contra de la desegregación racial, es decir, que blancos y negros compartieran los mismos espacios, ya que antes había escuelas y locales públicos exclusivos para cada raza.
Para entenderlo, hay que remontarse a 1975, cuando Biden se estrenaba como senador de Delaware.
En ese momento, estaba todavía fresca la lucha por los derechos civiles, que buscó justamente acabar con la ominosa separación de las razas.
Un punto crítico al respecto, era la posibilidad de que los niños blancos y negros se educaran y se transportaran en las mismas escuelas y buses.
En ese momento, precisamente, hizo varios pronunciamientos y acciones en contra de ello, lo cual, al decir de sus críticos, hace un fuerte contraste con sus reparos al fallo de la corte sobre discriminación positiva.
Una de esas muestras fue ser el autor de un proyecto de ley que obstaculizaba que los estudiantes de ambas razas se mezclaran en los transportes escolares, como lo recordó Fox News, canal de abierto corte conservador y, por ende, poco adepto al presidente, quien es miembro del partido demócrata.
Fox también recordó que, hasta un periódico proclive a su partido, el Washington Post, le recordó durante la campaña electoral, en 2019, cómo se opuso a la supresión de la segregación racial en los años 70.
“Biden asumió un papel de liderazgo en esa lucha, hablando repetida y enérgicamente en contra de enviar a los niños blancos a escuelas de mayoría negra y a los niños negros a escuelas de mayoría blanca”, escribió el Post.
“Le restó importancia a la persistencia del racismo manifiesto y sugirió que el gobierno debía tener un papel limitado en la integración”, agregó el influyente periódico de la capital del país.
El Post, así mismo, le enrostró al entonces vicepresidente y candidato frases tan duras como estas que le dijo a un periódico de Delaware:
“No compro el concepto, popular en los años 60, que decía: ‘Hemos reprimido al hombre negro durante 300 años y el hombre blanco ahora está muy por delante en la carrera por todo lo que ofrece nuestra sociedad. Para igualar el marcador, ahora debemos darle al hombre negro una ventaja, o incluso detener al hombre blanco, para igualar la carrera. No me lo creo”.
El canal también recordó como Kamala Harris, en la competencia por la candidatura demócrata, le dijo que se vio afectada en su niñez por esas posturas.
Al respecto, la Casa Blanca respondió que Biden se ha pasado su larga carrera política luchando contra la separación de razas en viviendas y centros educativos.