La división de la oposición en Venezuela parece que se profundiza con el tiempo. Ahora la manzana de la discordia son las negociaciones que adelantaron los líderes opositores Henrique Capriles y Stalin González con el gobierno de Nicolás Maduro para lograr el indulto de más de cien miembros de la oposición y diputados perseguidos. El martes el equipo de prensa de Juan Guaidó, presidente interino de Venezuela reconocido por unos 50 países, informó que desconocían de las "gestiones personales" realizadas por Capriles y González. Según el comunicado, las conversaciones "se hicieron sin conocimiento ni autorización del Gobierno interino, la Asamblea Nacional, nuestros aliados internacionales, ni del acuerdo unitario alcanzado y anunciado por 27 organizaciones políticas".
Capriles, uno de los fundadores del partido Primero Justicia, reaccionó a Guaidó asegurando que está dispuesto a conversar con quien pueda acercarlo a una "solución creíble" a la crisis política. "Hoy, por mis ‘gestiones personales‘, nos sentimos satisfechos de la libertad de 110 presos políticos", tuiteó.
Por su parte, Stalin González, quien representó en el pasado a Guaidó en tentativas de diálogo con el Gobierno de Maduro, dijo en un tweet este miércoles: "Por mi parte intentaré las veces que sea necesario encontrar una solución a la crisis. La política se trata de ayudar a la gente. Si una negociación evita que este conflicto escale y sea más doloroso para los venezolanos, lo haré las veces que sea oportuno".
Las tensiones entre los lideres de las oposición tienen de fondo las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre. Guaidó junto con otras 27 organizaciones políticas anunciaron que no participarán en los comicios debido a la falta de condiciones para que sean libres y justos. Por el contrario, Henrique Capriles y otros liderazgos han señalado que las elecciones pueden ser una oportunidad de movilizar a la población y negociar con el gobierno mejores condiciones para una transición de poder.
Maduro con el indulto busca bajar las tensiones con la oposición y convencerla de que participe en las elecciones, lo cual le daría un poco de legitimidad a los resultados. Así lo expresó el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, durante el anunció de la medida en televisión. “La intención es profundizar el proceso de reconciliación nacional de cara al próximo proceso electoral”, dijo. Por esta razón, Guaidó rechaza cualquier negociación con el gobierno. La disputa solo evidencia que los partidos de oposición en Venezuela no se han puesto de acuerdo sobre la forma en que encararán la lucha contra el gobierno de Nicolás Maduro.