En la tarde este miércoles el Congreso de la República de Guatemala ha desconocido a Movimiento Semilla, del presidente electo Bernardo Arévalo (2024-2028), por orden de un juez, ha declarado el medio regional AlbertoNews.

Tanto Arévalo como otros cuatro políticos quienes obtuvieron sus escaños en las pasadas elecciones legislativas, pasarán a ser rotulados bajo el lema de “independientes” como resultado de la decisión de la junta directiva del legislativo nacional a la cabeza de Shirley Rivera, perteneciente al partido oficialista Vamos.

Los guatemaltecos eligieron presidente el pasado 20 de agosto en donde el alternativo Bernardo Arévalo fue el vencedor de los comicios. | Foto: 2019 Anadolu Agency

La medida ratificada por el Congreso se da por una orden penal del pasado 12 de julio por parte del juez Fredy Orellana, el cual está acusado por corrupción por parte del Departamento de Estado de los Estados Unidos.

Una persecución anunciada

Desde el pasado lunes las autoridades electorales guatemaltecas declararon la total validez de la segunda vuelta electoral del 20 de agosto en donde el Movimiento Semilla con un 61% delos votos fue el gran ganador haciéndose con la presidencia y vicepresidencia de la nación Bernardo León y Karin Herrera, respectivamente. No obstante, la oficialización de estos resultados ha quedado suspendido provisionalmente.

Bernardo Arévalo se centró en un discurso político anticorrupción, lo que lo hizo merecedor del 61% de los votos de los guatemaltecos. | Foto: Restringido

Desde el Registro de Ciudadanos, un departamento que depende del Tribunal Supremo Electoral (TSE) suspendió al 28 de agosto la personería jurídica del Movimiento Semilla ordenado por Fredy Orella, un juez penal rotulado como corrupto y antidemocrático por parte de Estados Unidos.

A pesar de que según lo relata El País de España esta decisión no afecta el nombramiento de Arévalo como presidente de Guatemala, esta suspensión de su partido afectará fuertemente su plan de gobierno además de generar más incertidumbre, de la que ya hay, en una nación donde el autoritarismo es evidente por parte de los expertos.

Durante las dos últimas semanas de agosto, la autoridad electoral de Guatemala estuvo firme en la negativa de aceptar la orden de Orellana, la cual acusaban de “ilegal” y como “una intromisión en las funciones del TSE”.

De igual manera, desde que el registrador nacional, Ramiro Muñoz, se negó a acatar una orden que el ministerio público apoyo por presuntas falsificaciones en el proceso de adhesión de militantes para conformar el partido político por considerarla ilegal el 21 de julio, ese organismo anunció una causa penal contra Muñoz y solicitó despojarlo de la inmunidad con la que goza para poder procesarlo por anomalías electorales.

Guatemala: sin un rumbo fijo en sus instituciones

Por su parte, algunos juristas han acusado el proceder ilegal de la orden de Orellana ya que la ley electoral dicta que “ninguna organización política se puede cancelar durante un proceso electoral”. No obstante, el registrador asevera que, como la segunda vuelta tuvo lugar el 20 de agosto, no hay ningún impedimento para que la orden penal no se pueda cumplir, la cual dejó sin partido político al presidente electo, Bernardo Arévalo. Asimismo, el Movimiento Semilla puede hacer uso de un recurso de nulidad ante el tribunal electoral.

Bernardo Arévalo ganó la segunda vuelta de las elecciones generales en Guatemala el pasado 20 de agosto. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved

Las elecciones generales de Guatemala se realizaron el 25 de junio pasado, con segunda vuelta el 20 de agosto, en donde los ciudadanos estaban citados a a las urnas para elegir a su próximo presidente, vicepresidente, 160 diputados que conforman el Congreso de la nación, 20 diputados para el Parlamento Centroamericano y 340 corporaciones municipales.

En la primera vuelta, el candidato, y ganador, Bernardo Arévalo logró el 15% de los votos y el 61% en la segunda vuelta. Por su parte, la ex primera dama Sandra Torres, cuyo exesposo es el expresidente Álvaro Colom, obtuvo el 21% de los votos en la primera vuelta y el 39% en la segunda. Por otro lado, el candidato del oficialismo, Manuel Conde, no pasó de la primera vuelta al solo lograr el 10% de los votos.