A pesar de que las manifestaciones en Perú comenzaron tiempo después de que el Congreso de la República, en conjunto con otras instituciones nacionales como la Fiscalía y la Defensoría “pusieran en su lugar” al expresidente Pedro Castillo, justo después de intentar disolver el órgano legislativo la semana anterior, momento en el que fue encarcelado antes de que pudiera refugiarse en otro país.
Algunos peruanos se han levantado a defender al mandatario que eligieron en las últimas elecciones, todo esto en una serie de manifestaciones que en ciertos momentos se han tornado violentas y que cada vez más representan una amenaza latente para el gobierno instaurado tras la crisis y el “golpe de Estado”.
En medio de ese tenso ambiente, este martes 13 de diciembre, medios locales informaron que los protestas se dirigieron hacia la planta compresora de gas natural de Kámani, en Cuzco, y según denunciaron estas personas se habrían tomado las instalaciones, lo que alertó a las autoridades nacionales, así como a la compañía de gas.
Justamente, la Transportadora de Gas del Perú (TGP) emitió una misiva en la que alertaba sobre los peligros de la toma de la planta de gas por parte de los manifestantes, afirmando que un daño en esta estructura podría afectar directamente en a las personas que estaban en la zona, así como al resto de la población peruana.
“Como medida preventiva, la empresa ha activado su plan de contingencias. En ese sentido, TGP se ha puesto en contacto con las autoridades competentes para restaurar el orden en la zona”, indicó en la misiva la empresa encargada, según recoge el medio local RPP, indicando que alrededor de 100 personas fueron las que se tomaron la planta.
Y agrega: “La compañía respeta cualquier manifestación ciudadana. No obstante, rechaza rotundamente cualquier acto de vandalismo o violencia que ponga en riesgo la vida y la salud de la población y del personal de nuestra compañía; así como el transporte del gas natural con el que se genera cerca del 50% de la electricidad que usamos todos los peruanos”.
Boluarte evalúa declarar el estado de emergencia
La presidenta de Perú, Dina Boluarte, reconoció que está evaluando la posibilidad de decretar el estado de emergencia a nivel nacional ante las protestas derivadas de su propio ascenso a la Presidencia tras la destitución y detención de Pedro Castillo como mandatario andino.
Los enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes ya han llevado a la presidenta Boluarte a declarar el estado de emergencia por 60 días en las regiones de Ica, Arequipa y Apurímac, epicentro de las protestas.
Sin embargo, la movilización ciudadana se ha expandido por el país hasta otras nueve regiones --Lima, Huancavelica, Junín, Áncash, La Libertad, Cajamarca, Cusco, Puno, Tacna, San Martín, Madre de Dios y Amazonas--.
En el marco de esta oleada de movilizaciones --en las que se ha llegado incluso a ocupar el aeropuerto de Cuzco y paralizar los trenes a Machu Pichu-- las autoridades han confirmado la muerte de al menos siete personas y cerca de 120 policías heridos.
Miles de personas están protestando en el sur del país por la destitución del expresidente Castillo como respuesta a lo que desde el Ejecutivo se ha tildado de “golpe de Estado”. En las protestas también se reclama al nuevo Gobierno una convocatoria de elecciones presidenciales.
*Con información de Europa Press.