En medio de la crisis social y militar que se presenta en Burkina Faso, país ubicado en el occidente de África, y luego de que el pasado mes de enero un grupo de militares se tomara por la fuerza el poder e instaurara una junta militar, este viernes 30 de septiembre, un nuevo hecho ha revertido el orden político interno.
Un grupo de uniformados dio a conocer que derrocó a la cabeza de dicha junta militar, la misma que había asumido el poder desde inicio de año en circunstancias similares.
El mensaje, entregado por este nuevo grupo de militares, se dio a conocer a través de un mensaje televisado dirigido a todo el país, en el que precisaron que relevaron del mando al gobierno de Paul-Henri Damiba.
Según precisan medios internacionales, este nuevo grupo de militares se encuentra al mando de un capitán del Ejército de ese país, reconocido como Ibrahim Traore, quien, tras tomar el mando ha dispuesto una serie de acciones encaminadas a preservar el poder en medio de la convulsionada situación.
Entre los primeros anuncios que se hicieron en el mensaje televisado, además de precisar el ‘relevo’ en el poder, está la disolución de las instituciones que actualmente ejercen el control, así como de la Constitución del país.
En su declaración, los golpistas precisaron que, en medio de la toma de poder, han previsto, además de la disolución del gobierno y la abolición de la actual Constitución, el cierre de sus fronteras, tanto aéreas como terrestres.
Dicha disposición, según precisaron los golpistas, entrará en vigor a partir de la medianoche de este viernes.
Según informaron en horas de la mañana de este viernes fuentes del Gobierno a medios internacionales, el golpe de Estado comenzó en horas de la mañana, cuando se evidenció la revuelta militar, con la ocurrencia de varios disparos en distintas zonas de la ciudad de Uagadugú, capital del país, lo que activó a algunos cuerpos afectos al régimen derrocado.
Según precisan medios internacionales como la AFP, la junta militar estaba sujeta a la existencia de inconformidades al interior de las filas uniformadas, debido a la existencia de inconformidades y diferencias al interior de la institución, lo que se traduce en los intentos de sublevación de algunos sectores de las tropas, luego de los cambios propios de la toma de poder en el mes de enero.
Tras el estallido de la protesta y la acción militar de este viernes, varias vías de la principal ciudad del país se encontraban cerradas por la acción de los militares, advirtiendo que, durante la jornada, la señal de televisión emitida por la cadena de televisión nacional fue suspendida.
Las diferencias al interior de la tropa, según describen medios internacionales, se habrían desprendido de la inequidad al interior de la institución, así como de problemas en el cumplimiento de algunos beneficios prometidos, como primas y algunas bonificaciones.
En su momento, el golpe de Estado del mes de enero derivó en la salida del poder del entonces presidente, legítimamente elegido, Roch Marc Christian Kaboré.
Pese a que uno de los compromisos de la derrocada junta militar era reforzar la seguridad, en las últimas semanas este aspecto se había deteriorado de manera significativa, con el aumento de atentados terroristas, atribuidos a organizaciones yihadistas.