La Defensoría del Pueblo de Perú anunció este viernes que alcanzó un acuerdo para la liberación de un grupo de turistas extranjeros y peruanos retenidos por indígenas de la Amazonía que protestan por la falta de ayuda gubernamental tras un derrame de petróleo.
“Tras diálogo con Apu (ndlr: líder indígena) de comunidades de Cuninico se aceptó nuestro pedido para liberar a personas que permanecían en embarcaciones retenidas en protesta por contaminación tras derrame de petróleo en río Marañón”, indicó la Defensoría en un mensaje en su cuenta de la red social Twitter.
La cifra sobre el total de personas retenidas se tornó, sin embargo, incierta, luego que una pasajera indicara que suman unas 150, más del doble de los 70 señalados el jueves por el líder Cuninico, Watson Trujillo. La Defensoría tampoco precisó el número.
Añadió que, “no obstante, insistimos en que el diálogo debe continuar conforme a los acuerdos de la reunión del 17 de octubre en Nauta, por lo que hacemos un llamado al Ejecutivo y a las comunidades a superar las diferencias y retomar la mesa de trabajo”.
El grupo, que incluye al menos una veintena de ciudadanos de Estados Unidos, España, Francia, Reino Unido y Suiza, permanece retenido desde las 10:00 a. m. del jueves, y casi no contaba con provisiones, según informó a la AFP Ángela Ramírez, que se encuentra a bordo entre los afectados.
Ramírez detalló que está junto a diez estadounidenses que viajaron a la Amazonia en una excursión de ciclismo de aventura.
“Emocionalmente hay de todo. Se ha vivido mucha ansiedad, mucha fatiga, ayer estaba más frío, hoy está bastante soleado, pero estamos en la embarcación y eso nos cubre bastante”, describió la también ciclista.
Explicó que algunos miembros de la comunidad de Cuninico que no están de acuerdo con la retención los ayudaron con dos bidones de agua.
“Tenemos esa agua, pero no sabemos qué pasará después si no logramos irnos hoy. Hay un bebé de mes y medio de nacido que debe ser amamantado, y su madre necesita comer bien”, agregó la deportista peruana.
Por su parte, los comuneros de Cuninico denunciaron que no tienen acceso al agua ni a la comida, según el presidente de la Federación de Pueblos Cocamas Unidos del Marañón (Fedepcum), Galo Vásquez Silva.
Señaló que Petroperú solo les ha dado una canasta básica, que, indicó, resulta “insuficiente para abastecer a las familias”.
Además, manifestó que el Gobierno no ha dado solución a sus demandas y han pedido que se declare en emergencia por los constantes derrames de petróleo.
Así mismo, comentó que se llegó al acuerdo para que los turistas retenidos sean llevados a su destino en lanchas en las próximas horas, pero advirtió que la embarcación se quedará hasta que se hagan presentes delegados del Consejo de Ministros.
“Hoy vamos a dar las facilidades para que esas personas puedan conducirse a su lugar de origen”, señaló por su parte un líder nativo Cuninico al canal estatal TV Perú, sin aportar mayores precisiones.
El dirigente señaló que tomaron “esta medida radical” para que el gobierno envíe una delegación a constatar el daño ambiental sufrido por el derrame de unos 2.500 barriles de crudo en el río Cuninico, el 16 de septiembre.
El presidente del Consejo de Ministros, Aníbal Torres Vásquez culpó a la población de Cuninico (Loreto) de cortar los tubos del oleoducto mientras los 150 turistas, entre nacionales y extranjeros, siguen retenidos.
Entre los viajeros hay discapacitados, embarazadas y bebés que permanecían en las embarcaciones con escasos alimentos y agua.
*Con información de AFP.