El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, respaldó este lunes a su homólogo de Perú, Pedro Castillo, señalando que los conservadores “están en su contra”, en el marco de la crisis política en la nación andina.
“Es evidente que el conservadurismo está haciendo labor en contra del Gobierno, legal y legítimamente constituido (...). Ganó el presidente Castillo, así lo decidieron los peruanos”, indicó el mandatario en su rueda de prensa diaria.
“Pero los conservadores son iguales en todos lados. Unos más burdos, otros más hipócritas. Son demócratas cuando les conviene. Cómo es posible que se lleven a cabo elecciones (...) y ya intentan destituirlo”, ha continuado, según ha recogido el diario mexicano Milenio.
López Obrador trazó un paralelismo también con la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, y aprovechó para enviar un mensaje al presidente electo de Chile, Gabriel Boric. “Le deseo a Boric que le vaya muy bien”, ha dicho.
Mientras se gesta la enésima moción de censura contra Castillo, varias fuerzas del Congreso ya adelantaron la pasada semana que no darían su aval al nuevo equipo de gobierno, encabezado por Héctor Valer, por las denuncias de violencia machista que pesan sobre él.
Con el anuncio de la recomposición del gabinete, el presidente deberá anunciar el que será su cuarto equipo de gobierno desde su victoria en las elecciones presidenciales de Perú, hace apenas ocho meses.
Luego de ocupar el cargo tres días, primer ministro de Perú fue despedido.
El saliente primer ministro de Perú, Héctor Valer Pinto, dijo el pasado sábado que se retirará a sus “cuarteles para curar sus heridas”, al día siguiente de que el presidente Pedro Castillo lo despidiera del cargo que había asumido tres días antes.
“En el campo de la batalla de la política hay que saber reconocer victorias y derrotas. Yo reconozco mi derrota”, dijo Valer, quien enfrentó una ola de repudio luego de que varios medios peruanos publicaran el jueves que fue denunciado por violencia doméstica en 2016.
Para mantenerse al frente del gabinete ministerial, Valer debía obtener un voto de confianza del Congreso, controlado con la oposición derechista, pero era prácticamente imposible que lo consiguiera tras las expresiones de rechazo en su contra, incluso de tres ministros del gobierno izquierdista.
“Han herido a un premier y por eso se retira a sus cuarteles para curar sus heridas y volver cuando el pueblo así quiera”, declaró Valer a los periodistas afuera del Palacio de gobierno, vestido con una casaca roja.
“Con el show de Valer la imagen de Castillo cambia para mal, porque parece un manejo político oscuro y de improvisación”, declaró a la AFP el analista político y exembajador Hugo Otero.
“Hay un gran desconcierto nacional porque, a través de sus actos, el presidente está destruyendo su imagen popular y de símbolo de esperanza con la que ganó la elección” de 2021, añadió.
Cuarto gabinete en seis meses
Castillo anunció el viernes en la noche, en mensaje difundido al país por televisión, que había optado por “recomponer” su gabinete, una medida que implicaba la salida de Valer, un abogado y parlamentario de 62 años.
Horas antes, la jefa del Congreso, la opositora María del Carmen Alva, había pedido a Valer que diera “un paso al costado”, pero el tiro de gracia se lo dieron aparentemente tres ministros que también cuestionaron los antecedentes de su superior jerárquico.
“El ejercicio público requiere de funcionarios libres de esas denuncias”, indicó en su cuenta de Twitter el canciller César Landa, un diplomático de carrera que posiblemente no será incluido por Castillo en el próximo gabinete, el cuarto en sus seis meses de gobierno.