Los vínculos de Elon Musk con países extranjeros “ameritan ser examinados”, juzgó este miércoles el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, al responder a una pregunta sobre la posibilidad de que la compra de Twitter por parte del magnate represente una amenaza para la seguridad nacional.
“Creo que la cooperación de Elon Musk y/o los vínculos técnicos con otros países ameritan ser examinados”, declaró el mandatario en una rueda de prensa en la que se refirió a las elecciones de medio mandato en las que los demócratas resistieron mejor de lo previsto a una “ola roja” republicana que al parecer se reduce a una corta mayoría en una sola cámara del Congreso.
“Ya sea que esté haciendo algo inapropiado o no –no estoy sugiriendo eso– solo estoy sugiriendo que vale la pena examinarlo. Y eso es todo lo que diré”, agregó en relación a Musk.
Sobre las elecciones del pasado martes, Biden reconoció la frustración de los votantes, pero dijo que la “abrumadora mayoría” de los estadounidenses apoyó su agenda económica en los comicios del martes, pese a que los republicanos le achacan la alta inflación.
“Creo que fue un buen día para la democracia. Y creo que fue un buen día para Estados Unidos”, dijo en rueda de prensa en la Casa Blanca. “La prensa y los expertos predecían una ola roja gigantesca, pero no se produjo”.
Para su predecesor republicano Donald Trump fue una noche decepcionante. Contaba con un resultado espectacular que impulsara una posible candidatura para reconquistar la Casa Blanca en 2024, tras prometer que el 15 de noviembre “hará un gran anuncio”.
“Aunque en cierto modo las elecciones de ayer fueron un tanto decepcionantes, desde mi punto de vista personal fue una gran victoria: 219 victorias y 16 derrotas”, resumió Trump en referencia a los candidatos a los que apoyó personalmente. “¿Quién lo ha hecho mejor que eso?” preguntó el expresidente de 76 años en su plataforma Truth Social.
Trump fue testigo, además, del apoteósico triunfo de Ron DeSantis, el gran ganador de estos comicios, que seguirá siendo gobernador de Florida, pero podría convertirse en su principal rival por la nominación presidencial del Partido Republicano.
En estas elecciones de medio mandato, que suelen dar una bofetada al partido en el poder, se renueva toda la Cámara de Representantes y un tercio de los escaños del Senado, además de numerosos puestos de gobernador y cargos locales.
Como era de esperar, el duelo por el control del Senado fue implacable. Con tres escaños todavía en juego se inclina por los demócratas, pero podría depender de una segunda vuelta en Georgia en diciembre.
Para sancionar a Biden, los republicanos necesitaban tan solo un escaño más para arrebatar el control del Senado. Pero por ahora el único que cambió de manos fue para los demócratas, con John Fetterman, gran defensor de las políticas económicas progresistas.
El senador de Carolina del Sur, Lindsey Graham, uno de los principales aliados de Trump, no se anduvo con rodeos y reconoció que las elecciones no han sido “una ola republicana, eso es seguro”.
Pero la Cámara Baja es otro cantar. Aunque los republicanos contaban con una ola roja, con 10, 25 o hasta 35 escaños de diferencia, y han tenido que contentarse con un puñado, parecen encaminados a recuperar la mayoría de esta cámara de 435 miembros por primera vez desde 2018.
El jefe de filas republicano Kevin McCarthy, quien era de los optimistas y llegó a pronosticar 60 escaños más, puso buena cara al mal tiempo. “Está claro que vamos a recuperar la Cámara”, dijo.
En una madrugada electoral tensa, más de 100 republicanos que propagan, sin pruebas, que las elecciones presidenciales de 2020, que ganó Biden, fueron un robo, ganaron alguno de los puestos en juego.
Pero algunos candidatos por los que Trump apostó claramente vivieron una noche amarga “y le costaron al partido la oportunidad de obtener escaños que deberían haber ganado”, declaró a la AFP Jon Rogowski, profesor de ciencias políticas de la Universidad de Chicago.
“Los votantes no solo rechazaron a muchos de los candidatos de Trump, sino también sus políticas”, asegura Rogowski, citando por ejemplo el aborto.
Elon Musk confirma que “Twitter hará tonterías” en los próximos meses; hay incertidumbre por los cambios que tendrá la red social
Desde que Elon Musk compró Twitter, casi que a diario, el multimillonario da de qué hablar en redes sociales; los despidos, la opción de cobrar para verificar las cuentas y otra serie de cambios que tiene pensados para potenciar su nueva adquisición salen a la luz pública con el paso de las horas.
Pero no todo es información suministrada por terceros o fuentes internas de la compañía; el propio Musk es quien se encarga de hacerse visible con los mensajes que envía a través de su perfil en su propia red social.
La última publicación del magnate, dueño de Space X y Tesla no da certeza sobre los cambios puntuales que se instaurarán en Twitter, pero sí deja claro que habrá un revolcón en la plataforma en la que se desconoce si su interfaz seguirá siendo la misma o si cambiará para siempre.
“Tenga en cuenta que Twitter hará muchas tonterías en los próximos meses. Mantendremos lo que funciona y cambiaremos lo que no”, escribió Musk en su perfil. Su mensaje se replicó rápidamente, teniendo en cuenta que es la celebridad con mayor número de seguidores en esta red social, puesto al que accedió luego de desembolsar 44.000 millones de dólares para quedarse con ella.
*Con información de la AFP.