Un hombre identificado como Perry Lott fue declarado inocente en Ada, Oklahoma, Estados Unidos, luego de 35 años de condena, en donde 30 de ellos estuvo en prisión. El hombre fue declarado culpable en su momento por violación y robo.

Las pruebas de ADN realizadas en 2014, a partir de las evidencias de violación en la víctima, dejaron en evidencia que el acusado no fue el responsable del hecho, de acuerdo con información de la organización Innocence Project.

Según medios internacionales, las autoridades imputaron en primera instancia solo con la identificación de Lott por parte de la víctima, debido a que se basaron en una rueda de reconocimiento sugestiva.

Sin embargo, se descubrió que no había pruebas físicas que involucraran al presunto responsable del crimen y la descripción física del verdadero agresor tampoco coincidía con Perry Lott.

De acuerdo con el reporte oficial, el cinematográfico intento de fuga iba a ser cometido por el feminicida apoyado por un familiar aprovechando la visita regular de los sábados. | Foto: Getty Images

Cabe mencionar que Lott presentó una moción para anular la condena en 2018, basado en los resultados de las pruebas.

No obstante, el exfiscal del distrito Paul Smith se opuso a la misma, pero ofreció modificar la sentencia, oferta que aceptó el 9 de julio de 2018, motivo por el cual Lott fue liberado de forma inmediata. En ese sentido, tuvo que esperar la decisión de anular la condena.

Pasado el tiempo, Innocence Project le manifestó anular la condena al nuevo fiscal del distrito, Erik Johnson. Por tal motivo, el fiscal hizo una revisión exhaustiva del caso y concluyó que los resultados de las pruebas de ADN eran suficientes para que la condena fuera anulada.

Ante la decisión del Fiscal Johnson, Perry Lott manifestó: “Nunca perdí la esperanza de que este día llegaría. Tenía fe en que la verdad prevalecería, incluso después de 35 largos años. Agradezco a todos los que me apoyaron y ayudaron en mi lucha por la libertad. Finalmente, puedo cerrar esta puerta y seguir adelante con mi vida”.

Un convicto asesinó a un guardia dentro de un centro penitenciario

Un guardia identificado con el nombre de Robert Clark, de 42 años de edad, murió en un hospital de Estados Unidos luego de que fuera atacado por un preso con un arma improvisada.

El trágico hecho ocurrió en la Prisión Estatal Smith, ubicada en la zona rural de la población de Glennville en el estado de Georgia, informó en un comunicado de prensa el Departamento Correccional del estado.

“Todo el Departamento Correccional de Georgia lamenta la pérdida de uno de nuestros miembros y expresamos de manera colectiva nuestras más sentidas condolencias a la familia y amigos del oficial Clark. Los apoyaremos en medio de esta tragedia”, declaró el comisionado de correccionales Tyrone Oliver.

Un guardia fue asesinado en Estados Unidos por un convicto en una cárcel del estado de Georgia | Foto: Con derechos gestionados de Getty Images

Según la información dada por las autoridades, Clark había comenzado a trabajar como oficial correccional hace seis meses.

El pasado domingo 1.° de octubre, día en el que sucedió el fatídico ataque, Clark se encontraba escoltando a dos presos en el comedor de la prisión. De un momento a otro, uno de ellos lo atacó por detrás, se lee en el comunicado emitido a medios.

El otro preso que se encontraba con Clark trató de ayudarlo, sin embargo, también fue herido por el agresor. El domingo estaba hospitalizado con heridas que no amenazaban su vida, dijo la agencia.

Layton Lester, quien cumple cadena perpetua por un asesinato y un robo cometido en 2007, fue quien hizo el fatídico ataque que enlutó a la familia del oficial.

El convicto que asesinó al guardia cumple una condena de cadena perpetua | Foto: Con derechos gestionados de Getty Images

El Departamento de Correccionales indicó que Lester ahora enfrenta cargos en su contra por la muerte de Clark y por agredir al otro preso, quien se recupera de las heridas en un hospital cercano a la prisión donde se cometió el asesinato.