Lula da Silva dio un emotivo discurso luego de conocerse que volverá a gobernar Brasil, tras ganarle en los comicios electorales a su oponente, Jair Bolsonaro. Millones de brasileños salieron a las calles a celebrar la victoria. Da Silva logró imponerse su adversario con más de 50 millones de votos, luego del escrutinio del 99 % de las mesas electorales.
En su discurso, lanzó un mensaje unidad a un Brasil que hoy se encuentra dividido entre la izquierda y la derecha. “A partir del 1 de enero de 2023 gobernaré para 215 millones de brasileños, y no sólo para los que me han votado. No hay dos países. Somos un Brasil, un pueblo, una gran nación [...] Este pueblo está cansado de ver al otro como enemigo. Es hora de bajar las armas”, afirmó Lula en su intervención.
También le dejó claro a la comunidad internacional que Brasil resurgirá y nuevamente será reconocido por el mundo entero.
“El pueblo desea más libertad, igualdad y fraternidad en nuestro país. El pueblo quiere comer bien, vivir bien, quiere empleo bien remunerado, quiere políticas públicas de calidad, quiere libertad religiosa y libros en lugar de armas [...] Le decimos al mundo que Brasil ha vuelto”, dijo el nuevo mandatario electo a sus miles de seguidores.
Da Silva también se refirió a la pena que pagó en la cárcel, en donde estuvo por más de 580 días encerrado. Luego esta fue anulada y pudo volver a la política de su país. “Tuve un proceso de resurrección en la política brasileña. Intentaron enterrarme vivo y ahora estoy aquí para gobernar el país”, aseveró.
Brasil se ha convertido en uno de los países donde niños y adultos mueren diariamente por cuenta del hambre, situación que piensa solventar el nuevo presidente electo. “No podemos aceptar como normal que millones de personas no tengan qué comer o que consuman menos de las calorías de las que necesitan [...] “Estoy aquí para gobernar este país en una situación muy difícil, pero con la ayuda del pueblo vamos a encontrar una salida para que el país vuelva a vivir democráticamente”, dijo da Silva.
Hubo tiempo para enviar un mensaje ambientalista, ya que Brasil alberga el mayor territorio de la selva del Amazonas, la cual se ha visto afectada por la deforestación y quema de bosque. Lula fue enfático en este tema. “Bajo nuestro gobierno, pudimos reducir la deforestación en el Amazonas en un 80 %. Ahora vamos a luchar por la deforestación cero”, apuntó.
La carrera por el poder estuvo bastante cerrada y con un poco más de un punto porcentual, el candidato del Partido de los Trabajadores se alzó con la victoria tras conseguir el 50,89 % de los votos, contra el 49,11 % de los obtenidos por Bolsonaro.
Luego de conocerse el triunfo, los simpatizantes de Lula se volcaron a las calles para celebrar el triunfo con juegos pirotécnicos, cacerolas y manifestaciones. El resultado de estas elecciones, que le dieron la victoria a la oposición, dejan en evidencia la polarización que atraviesa el país con la sexta economía más grande del mundo.
Algunos videos publicados en Twitter por los seguidores de Lula muestran la alegría tras haber ganado la presidencia para los próximos cuatro años. Al ritmo de la samba, escena similar a las que se registraron cuando Brasil levantó la Copa del Mundo en 2002, quienes votaron por el representante de la izquierda festejaron haber derrotado a el ala de derecha que actualmente gobierna en Brasil.