El ministro venezolano de Petróleo, Pedro Tellechea, informó el viernes que el país está cerca de producir un millón de barriles diarios de crudo. Una cifra a lo que no llega desde hace más de cinco años, entre sanciones internacionales, corrupción y mala gestión. “Podemos decir oficialmente que estamos por encima de 950.000 barriles” diarios (bd), dijo el funcionario, que también preside la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).
“En los próximos días estaremos dando ya el millón de barriles, una alegría para Venezuela”, añadió Tellechea durante la inauguración en Caracas de un nuevo sistema de distribución de gasolina. Según la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), la producción del país sudamericano se ubicaba en 910.000 bd al cierre de mayo. La última vez que Venezuela alcanzó una producción por encima del millón de barriles fue a comienzos de 2019, año en que Estados Unidos aplicó una batería de sanciones que incluyeron un embargo del crudo venezolano.
Para 2020 cayó por debajo de los 400.000 bd, marcando la producción más baja en tres décadas, que el gobierno atribuye a las “medidas coercitivas” aplicadas por Washington para forzar, sin éxito, la salida del presidente Nicolás Maduro, quien buscará el 28 de julio un tercer mandato de seis años.
En octubre pasado, Estados Unidos levantó parcialmente por seis meses el embargo, tras alcanzar acuerdos entre el Ejecutivo y la oposición sobre la elección, pero revirtió la medida tras cuestionar acciones del gobierno en torno al proceso.
Las empresas que quieran operar en el país deben pedir ahora licencias individuales en Washington como la que tiene el gigante Chevron. Varias empresas ya las tramitaron, como la española Repsol y la francesa Maurel & Prom (M&P). Tellechea sustituyó en el cargo al poderoso Tareck El Aissami, apresado por su supuesto involucramiento en un desfalco calculado en 17.000 millones de dólares, según Transparencia Venezuela.
Expertos coinciden en que, además de las sanciones, la corrupción endémica y años de desinversión contribuyeron igualmente al colapso de esta industria que en 2008 tenía una producción por encima de los 3 millones de barriles diarios.
Crítica del G7 a Venezuela
Los países del G7 criticaron este viernes a Venezuela por retirar su invitación a la Unión Europea (UE) para observar las presidenciales del 28 de julio y pidieron garantías para la oposición, según un borrador de la declaración final de la cumbre del grupo en Italia, que Caracas rechazó.
“Estamos profundamente preocupados (...) con respecto a los derechos de la oposición dentro del proceso electoral y la decisión de retirar la invitación para una misión de observación electoral de la UE”, dice el G7 en el documento al que la AFP tuvo acceso.
La declaración fue fustigada por la Cancillería de Venezuela, aunque apoyada por la principal líder de oposición María Corina Machado, quien no pudo concurrir a los comicios por una inhabilitación pero que usa su popularidad para respaldar a su sustituto, el diplomático Edmundo González. “El decadente imperialismo jamás había tenido tan pobre y ridículo liderazgo como el que hoy exhibe el G7. Rechazados por sus propios pueblos pretenden recurrir a prácticas coloniales y meterse en asuntos que no le conciernen”, aseguró el canciller venezolano, Yván Gil, en la red social X.
Machado, en tanto, agradeció al grupo de las siete mayores economías industrializadas por su “apoyo inequívoco a la democracia y a las elecciones libres y justas” en Venezuela. En mayo, el Consejo Nacional Electoral venezolano (CNE), de línea oficialista, anunció su decisión de excluir la misión de observación de la UE del proceso electoral de julio, en el que el presidente Nicolás Maduro buscará un tercer mandato.
La decisión del CNE fue adoptada después de que el bloque europeo ratificara sanciones individuales contra unos 50 funcionarios, al denunciar una “actitud hostil”. El G7, que reúne a Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido, también pidió a Caracas garantizar “elecciones competitivas e inclusivas”, así como “el fin del acoso a los miembros de la oposición y la liberación inmediata de todos los presos políticos”.
Varios mandatarios, entre otros líderes mundiales, celebran la cumbre anual del grupo en Borgo Egnazia, un resort de lujo en la región de Apulia, en el sur de Italia.
*Con información de AFP.