En el marco de la sesión ordinaria número 109 de la Convención Constitucional de Chile, órgano encargado de formular la nueva Constitución de ese país, y cuando se avizora el fin de este camino para formular la nueva Carta Magna, una serie de voces críticas y contundentes se oyeron en el lugar de reunión para manifestar su insatisfacción con el resultado del proceso adelantado.
Una de esas voces fue la de la abogada y asambleísta Rocío Cantuarias, representante del denominado Distrito 20, quien sentó su posición frente al borrador de la Constitución, y advirtió, desde ya, que promoverá el voto negativo en el referendo refrendario en el que los chilenos darán aprobación o no a la adopción de este nuevo documento rector.
Si bien Cantuarias no fue la única que se expresó en desacuerdo y rechazo por los vicios que marcaron el proceso, y la forma en la que, según ellos, dicha carta magna será contraproducente para su país, sí fue una de las que mayor reflexión despertó por la tenacidad y contundencia de sus aseveraciones.
Cuando tomó la palabra, la asambleísta advirtió que durante todo el proceso de formulación de la nueva constitución ella sintió a prueba sus principios y valores, señalando que “todo lo que soy y he creído en mi vida, fue puesto a prueba en esta sala: los he escuchado cuestionando y ninguneando todos los valores en los que creo”.
La asambleísta lamentó el escenario al que estuvo expuesta, admitiendo que la Constitución que será votada por los chilenos es un retroceso en la construcción del país que, según ella, es el mejor de Sudamérica, advirtiendo que la nueva Carta Magna representa un “desprecio por la vida humana”, refiriendo las posiciones que en ella se toman frente a temas trascendentales como la maternidad, el aborto y la eutanasia.
En ese mismo sentido, la mujer rechazó cómo sus compañeros asambleístas “no creen en la vida humana, ni en la libertad personal, en la igualdad de todas las personas en dignidad y derecho”.
Lo anterior, para prender las alarmas frente a lo que se ha señalado en múltiples espacios, como la abolición de algunos derechos adquiridos por los chilenos, y consagrados en la Constitución que actualmente les rige, los cuales fueron acomodados, según los intereses de un importante sector de los asambleístas, quienes en la nueva Constitución han apostado por un debilitamiento estatal.
En sus críticas, también referidas con antelación en múltiples escenarios de opinión por la asambleísta que representa a la región de la Arauco, esta afirmó que la nueva Constitución dejará “sin herramientas al presidente para atacar la violencia, la inseguridad y el terrorismo”, notando también que irá en contra de los intereses de los trabajadores chilenos, cuestionando a su turno que no contemple las consultas a los pueblos indígenas.
De igual modo, Cantuarias notó la forma en la que se atentará contra los ciudadanos, en tanto no se abogó por la igualdad en la Carta Magna, sino por el contrario por la segregación y división de la población chilena. La mujer criticó cómo este nuevo documento prevé ‘ciudadanos de primera y segunda categoría’.
“Ustedes desprecian ser chilenos”, sentenció la mujer, denunciando falta de amor por lo que es su país, y notando aspiraciones particulares en sus compañeros en la labor de formular la nueva constitución.
“Los miro, y veo a aspirantes a revolucionarios rusos, a dictadores africanos, a guerrilleros caribeños, a burócratas soviético, pero no veo a nadie que aspire a ser un trabajador chileno, no veo a nadie orgulloso de lo que somos: un pueblo mestizo, que a puro ‘ñeque’ ha construido el mejor país de Sudamérica”, dijo la mujer.
En su arremetida, la constituyentes afirmó que en ese espacio, en le que se debería propender por la defensa de la democracia, y la construcción de un marco legal para todos los chilenos, se encontró con personas que “aman la pobreza y quieren multiplicarla, aman la ignorancia y quieren difundirla, aman la esclavitud y le temen a la libertad”.
Según Cantarias, el borrador de Constitución que se derivó del proceso promoverá la violencia en su país, señalando que en su contenido se abre la puerta para el despojo de “tierras, aguas y ahorros a miles de chilenos”.
“Les quiero agradecer, me han permitido tener un año de reflexión respecto de lo que soy y de lo que creo, nada de eso ha quedado plasmado en su Constitución”, afirmó la mujer, quien desde ya anunció que votará de forma negativa, y advirtiendo que son muchos los chilenos que creen en los mismo, afirmando que en vez de estar representados, ‘son discriminados’.
“Ustedes han suprimido todos los frenos y contrapesos a la política, para darle todo el poder a una cámara única, donde pueden ser elegidos delincuentes”, advirtiendo que “será tan poco democrática, que se integrará con miembros designados”, lamentando que la nueva carta política de luz verde al ‘abuso de la democracia’ y abra las puertas a los delitos al interior de las instituciones oficiales.
“Más que redactar una Constitución, la han perpetrado”, dijo la representante, haciendo, posiblemente, alusión a que la nueva carta magna formulada para Chile, es un atentado contra Chile y los chilenos.