Un equipo de químicos de la Universidad HSE y del Instituto Zelinsky de Química Orgánica de Rusia utilizó la modelización molecular para descubrir que dos medicamentos conocidos desde hace mucho tiempo pueden utilizarse para combatir la covid-19. En concreto, son el disulfiram, que se utiliza para tratar el alcoholismo, y el neratinib, un fármaco experimental que se utiliza para tratar el cáncer de mama.
En su trabajo, publicado en la revista ‘Mendeleev Communications‘, los investigadores utilizaron un modelo espacial del SARS-CoV-2, y los posibles medicamentos efectivos se tomaron de la base de datos de fármacos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés). Para la modelización se utilizaron los algoritmos propios del equipo de investigación. Los datos de la modelización demostraron que los medicamentos que contienen azufre muestran una eficiencia inusualmente alta del ligando en el centro activo de la proteasa principal Mpro del SARS-CoV-2, pero solo el disulfiram 4 conserva interacciones estables. Hoy en día, se utiliza más comúnmente para el tratamiento del alcoholismo. El disulfiram combate el SARS-CoV-2 de dos maneras. Primero, como se demostró anteriormente ‘in vitro‘ con el SARS y los coronavirus MERS, es un inhibidor covalente. Además, combate los síntomas de la covid-19, como la disminución significativa del glutatión reducido, que es un importante antioxidante. Esta deficiencia puede conducir a manifestaciones graves de la enfermedad. Además del disulfiram, los químicos rusos fueron los primeros en predecir la posible eficacia del neratinib, un inhibidor irreversible de la tirosina quinasa, contra el SARS-CoV-2. Recientemente, en 2017, la FDA aprobó el neratinib como tratamiento adyuvante del cáncer de mama.
Los modelos han demostrado que ambos inhibidores son, presumiblemente, covalentes. Por ejemplo, el disulfiram puede probablemente bloquear la actividad enzimática de la M pro mediante la reacción de intercambio de tiol-disulfuro, mientras que la unión del neratinib sugiere la posibilidad de una interacción covalente similar a la de los inhibidores del péptido covalente.