Los médicos de familia franceses iniciaron este lunes una semana de huelga para exigir un aumento de la retribución por consulta de 50 euros (250 mil pesos colombianos), el doble de los 25 actuales (150 mil pesos), y otras mejoras en sus condiciones laborales.
El colectivo Médicos del Mañana defendió la necesidad de mejorar sus condiciones de trabajo a pesar de la falta de apoyo de los principales sindicatos y las críticas del Gobierno, que considera que “realmente no es el momento”.
Las autoridades culpan a la triple epidemia de covid-19, gripe y bronquiolitis que en muchos casos saturaron las urgencias de los hospitales.
“Realmente no es el momento. Estamos en una situación terrible. No es que estemos saturados, estamos sobresaturados”, señaló el presidente de la asociación de médicos de emergencia de Francia, Patrick Pelloux. También el ministro de Sanidad, François Braun, ha realizado un llamamiento a la “responsabilidad”.
“Sin cuestionar el derecho de huelga, hago un llamamiento a la responsabilidad porque el período entre Navidad y Año Nuevo siempre es complicado”, dijo en una columna publicada en prensa.
Los médicos de atención primaria reivindican por su parte que son “indispensables” porque evitan numerosas visitas a urgencias cuando son consultados por sus pacientes.
La salud mundial en el 2023
Un panel de expertos del centro independiente de investigación de salud global de la Universidad de Washington, el Institute for Health Metrics and Evaluation, señaló los problemas de salud global que se van a tener que tener en cuenta en 2023, y, afirman, que los tres primeros será la covid-19 persistente, la salud mental y los efectos del cambio climático.
Con la llegada del cuarto año desde el comienzo de la pandemia, los expertos destacan la covid-19 persistente es un problema de salud a tener en cuenta, ya que su impacto en la salud a menudo interrumpe la capacidad de una persona para realizar vida normal.
“Las personas con covid prolongado necesitan apoyo diagnóstico y de rehabilitación adecuado por parte de los médicos de atención primaria. Necesitamos desesperadamente más investigación para encontrar tratamientos efectivos, así como medidas preventivas para reducir el riesgo de desarrollar Covid prolongado”, señala Sarah Wulf Hanson, científica investigadora principal del equipo.
Por otro lado, aseguran que hay que tener en cuenta los trastornos mentales, que son una de las principales causas de discapacidad en todo el mundo, sin evidencia de una disminución de esta carga desde 1990.
El impacto de la pandemia de covid-19, la guerra y la violencia en la salud mental sigue siendo una prioridad, específicamente comprender cómo han impactado en la prevalencia y carga de los trastornos mentales a partir de 2022 y cómo los países deberían adaptar su respuesta de salud mental en consecuencia.
En tercer lugar, se encuentra el cambio climático que ya está afectando la salud de millones de personas en todo el mundo y, lo que es más importante, el cambio climático empeorará a lo largo de este siglo.
Le siguen las enfermedades cardiovasculares, ya que “contribuyen sustancialmente a la pérdida de salud y a la carga económica de los sistemas de atención médica”. “La mayoría de las enfermedades cardiovasculares se pueden prevenir al abordar los factores de riesgo cardiovasculares modificables, como la presión arterial alta, el colesterol alto, la obesidad, los riesgos dietéticos, el tabaquismo y la contaminación del aire”, afirma Christian Razo, investigador posdoctoral.
En quinto lugar, se encuentran las infecciones de las vías respiratorias inferiores (LRI), especialmente el virus respiratorio sincitial (RSV) y la gripe. Tras su disminución por a pandemia y con el uso de mascarillas, este 2022 han vuelto con fuerza. Los expertos apuesta por el desarrollo de una vacuna para el virus respiratorio sincitial.
El papel de la pobreza en la salud es señalado en sexto lugar, señalando directamente a los países de bajos y medianos ingresos donde la esperanza de vida es 34 años menor, la mortalidad de menores de 5 años es alrededor de 100 veces mayor, las muertes por violencia interpersonal y suicidio son 30 veces mayores y las muertes atribuibles a la resistencia a los antimicrobianos (RAM) son 12 veces mayores.
*Con información de Europa Press.