Bajo la premisa de que el aumento en el salario mínimo guarda una relación directa con la inflación (que para Colombia se ubicó en octubre en 12,22 %), expertos evalúan el panorama en el país, a un mes de que finalice el año. La incertidumbre sobre la discusión entre el Gobierno, empresarios y sindicatos agudiza a más hogares que ven sus ingresos reducidos, mientras los gastos incrementan.
Mientras el Gobierno de Gustavo Petro vaticina que el aumento puede ser del 15 %, no será sino hasta el 30 de noviembre cuando comiencen formalmente las reuniones, según el Ministerio de Trabajo. La primera de ellas, estará a cargo de la subcomisión de productividad, y cinco días más tarde entrará a debatir una mesa de concertación.
En el caso de nuestro país, analistas enfatizan en la relación entre productividad, inflación y salario mínimo para entender cuánto pueden llegar a devengar los ciudadanos a partir de 2023. En este momento, el monto está en un millón de pesos que podría situarse entre $1.100,000 y $1.150.000, según indicó el viceministro de Hacienda, Diego Guevara, a semanas de que se conozca la decisión final.
¿Cuáles son las alternativas?
La eterna discusión gira en torno a quienes buscan, como imperativo, defender el crecimiento económico y los que se centran en los hogares colombianos, donde el bolsillo no da abasto. SEMANA analizó el panorama con Michael Díaz, docente de la Facultad de Contaduría Pública en la Universidad Santo Tomás.
“Si hay un incremento por encima, como tal de la productividad, podemos encontrarnos ante un aumento tal vez muy amplio frente a la inflación. Cuando hay un” alza de esta, se generaría un ascenso “en el costo de vida que va a afectar directamente a la clase media a baja”, explica.
Respecto al pago de los arriendos, una de las inquietudes constantes es que el dinero no alcanza. En esa línea “se debe tener en cuenta que, si hay un incremento elevado en el salario mínimo, de alguna forma, se refleja en una mayor inflación que va a impactar en estos servicios primarios”. El gobierno “tendría que analizar un escenario para mitigar esos efectos, a partir de subvenciones y algunos subsidios para la adquisición tanto de bienes como de servicios” fundamentales, agrega Díaz.
¿Cuál es el panorama en Chile y Argentina?
Comenzando este año, Chile tenía un salario básico de 350.000 pesos (cerca de $1.840.000, haciendo la conversión para Colombia). Desde que Gabriel Boric asumió la presidencia, el monto se ha subido en dos oportunidades y a la fecha permanece en $400.000 (en moneda local), con la previsión de que para el próximo año aumente a $410.000.
“Sueldo mínimo de 500 mil pesos, reestructuración de las policías para que estén donde se les necesita, salud y medicamentos en un Sistema Universal son algunas de las propuestas que marcan la diferencia en nuestro proyecto”, dijo el jefe de Estado a finales de 2021 cuando estaba a poco de cerrar su campaña electoral.
En cuanto a Argentina, el monto se ubica en $1.701.300 (haciendo el cambio con nuestro país) el alza se acordó, durante los últimos días, en tres fases: En diciembre subirá un 7 %, enero 6 %, febrero 4 % y marzo 3 %.
“Tomada con mayoría absoluta de los integrantes del Consejo del Salario, es otra muestra del valor de nuestra democracia: no hay forma de hacer política sin diálogo. Seguiremos trabajando por una sociedad más justa en donde todos ganen”, señaló el presidente Alberto Fernández.