El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, estuvo este martes en Washington intentando desesperadamente evitar que el Congreso de Estados Unidos corte la ayuda militar vital para su país. Zelenski llegó al Congreso en torno a las nueve de la mañana para hablar con los miembros del Senado, la Cámara Alta en manos de los demócratas del presidente Joe Biden.
Después lo hará con los congresistas de la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos y bastante reticente a seguir apoyando a Ucrania. Entretanto, Rusia es muy consciente de la erosión del apoyo estadounidense, sobre todo con el fracaso este verano boreal de la contraofensiva ucraniana y este martes aseguró haber realizado progresos “significativos” en la región de Zaporiyia, en el sur del país.
Moscú apuesta a que “un estancamiento militar durante el invierno socavará el apoyo occidental a Ucrania”, por lo que “está determinada a presionar” en todos los frentes, advirtió la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Adrienne Watson. Es la tercera vez en un año que Zelenski acude al Capitolio de Washington, sede del Congreso, y sin duda su visita “más importante”, dijo el líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer.
El Congreso estadounidense se ha comprometido a desembolsar más de 110.000 millones de dólares desde el inicio de la invasión rusa, en febrero de 2022, pero no se pone de acuerdo sobre el nuevo paquete reclamado por Biden de unos 61.000 millones de dólares, suficientes para aguantar al menos hasta las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024.
“Putin y su camarilla”
Los demócratas están a favor de este nuevo paquete. Los republicanos no se oponen completamente, pero exigen en contrapartida importantes cambios en la política migratoria estadounidense. En este punto, las discusiones están estancadas. El presidente Biden acompañó su petición de ayuda a Ucrania con un paquete de unos 14.000 millones de dólares para Israel, en guerra con el movimiento islamista palestino Hamás, con la esperanza de salvar así las reticencias de los republicanos. De momento, en vano.
El líder demócrata recibirá a su homólogo ucraniano a primera hora de la tarde en la Casa Blanca, antes de una rueda de prensa conjunta. “Si hay alguien que se alegre con estos temas sin resolver en el Capitolio es Putin y su camarilla enfermiza”, acusó el lunes Zelenski. Tras su reunión con los senadores estadounidenses, Zelenski tiene previsto un encuentro con el presidente de la Cámara de Representantes.
Esta reunión con el republicano Mike Johnson es especialmente importante en un momento en que algunos congresistas de la derecha radical piden el cese total de la ayuda. “Zelenski ha venido a mendigar y los ‘belicistas’ de Washington quieren darle una ayuda ilimitada”, criticó en la red social X Marjorie Taylor Greene, representante de este movimiento. En teoría, el Congreso solo tiene de plazo hasta el viernes –cuando comienza el receso parlamentario– para alcanzar un acuerdo.
La Casa Blanca ha advertido que “se quedará sin dinero” a finales de año si no se hace algo. Ucrania teme que un estancamiento duradero en Estados Unidos afecte también a la ayuda militar europea, a pesar de la llegada al poder en Polonia de un nuevo gobierno más favorable a apoyar a Kiev. El martes, el Kremlin afirmó que cualquier nueva ayuda estadounidense está condenada a ser un “fiasco”.
Ofensiva masiva
Rusia presiona cada vez más en el este y el sur de Ucrania. A costa, según los servicios de inteligencia estadounidenses, de muchas bajas: 13.000 soldados rusos muertos o heridos desde octubre y más de 220 vehículos perdidos en la línea del frente entre Avdivka y Novopavlivka desde que Rusia reanudó su asalto en octubre, según una estimación transmitida a la AFP.
El Ejército ruso ha realizado avances “significativos” en la región ucraniana de Zaporiyia, parcialmente ocupada, declaró el martes Evgeny Balitsky, gobernador instalado por Moscú.
Hace dos días, los rusos lanzaron también una “ofensiva masiva” en torno a Avdivka y Mariinka, en el frente oriental, declaró Oleksandre Tarnavski, comandante ucraniano en la zona, quien asegura que sus tropas mantienen sus posiciones. La AFP no ha podido verificar estas afirmaciones.
Moscú prosigue también sus ataques diarios en toda Ucrania y se sospecha que está detrás de un “potente” pirateo informático que paralizó al principal operador ucraniano de telefonía móvil, Kyivstar, según los servicios de seguridad ucranianos.
*Con información de la AFP.