Este miércoles -8 de febrero- es el tercer día desde que un terremoto de magnitud 7,8 golpeó hasta la devastación a Turquía y Siria, dando paso a un panorama de caos que ha cobrado la vida de más de 11.000 personas en ambos países. Las tareas de rescate continúan ahora con ayuda de algunos países que, desde este martes, empezaron a desplegar su asistencia.
La lucha para encontrar más sobrevivientes se enfrenta a la inclemencia del tiempo, pues a medida que transcurren las horas, las esperanzas de supervivencia disminuyen. Sin embargo, algunos residentes siguen con su fe intacta de recibir noticias sobre sus familiares y amigos, y a la espera de que se encuentren con vida.
En medio de la incertidumbre por los desaparecidos y el número de víctimas mortales que aumenta, se han conocido también historias que avivan la confianza a pesar del dolor. Por ejemplo, el rescate de niños bajo los escombros ha supuesto la creencia y aliento de que más personas lograrán ser salvadas durante esta y las próximas jornadas.
¿Fue un milagro?
En la Catedral de la Anunciación, conocida también como Iglesia Católica de Alejandreta (en Hatay, Turquía), la imagen de la Virgen María se convirtió en un símbolo de resistencia. La estatua quedó ‘intacta’, a pesar del impacto del terremoto que devastó el resto del recinto, en el que se encontraba al punto de, incluso, desplomarse el techo.
El sacerdote, Antuan Ilgıt, se ha valido de su cuenta de Facebook para hacer actualizaciones tras el movimiento telúrico y sobre los pedidos, así como ayuda recibida con alimentos y bebidas. Para él, ver la sonrisa de la gente con la asistencia es una sensación “indescriptible”.
En esa red social, el religioso compartió imágenes de cómo quedó ese templo tras el terremoto y su réplica, además de dos imágenes de María. La primera corresponde a un cuadro de la Virgen del Socorro, cubierta con algunas manchas de tierra, mientras la segunda es una estatua a la que no se le observa daño alguno como sí se ve en la pared contigua (con grietas).
Daños en templo son “impresionantes”
Ilgıt señaló que el derrumbe en la Catedral era “impresionante” y que hacía unos pocos días habían celebrado allí una eucaristía dominical. También aseguró que, junto a otros miembros de la comunidad, estaba intentando apoyar a personas católicas, ortodoxas y musulmanas.
“Traje la imagen de la Virgen María de la Catedral, esta imagen será nuestra fortaleza y con ella afrontaremos todo. Sigamos confiando en Dios y en su Santa Providencia. Está lloviendo, hace frío y los temblores son tan fuertes. Sentimos tu cercanía y nos importa. También llevamos en el corazón a nuestra querida Siria. ¡Que el Señor nos guarde en su amor y nos sea favorable!”, dijo el sacerdote.
Papa pidió ayuda concreta
El papa Francisco instó este miércoles –8 de febrero– a la comunidad internacional para que apoye concretamente a los damnificados que dejó el terremoto en Turquía y Siria. “Con emoción rezo por ellos y expreso mi cercanía a estos pueblos, a las familias de las víctimas y a todos los que sufren esta calamidad devastadora”, señaló el pontífice.
Durante su audiencia general de cada semana, el jerarca de la Iglesia Católica aseguró que sus “pensamientos se dirigen a los pueblos de Turquía y Siria duramente golpeados por el terremoto, que ha causado miles de muertos y heridos”, recogió Europa Press. Francisco agradeció el trabajo de quienes buscan señales de vida entre los escombros.
Al término de su audiencia, se refirió, además, como ha hecho en la mayoría de sus intervenciones, al pueblo ucraniano sobre el que pidió no dejar en el olvido. El papa hizo énfasis en que el país sigue “tan martirizado por este frío, sin luz, sin calefacción y en guerra”.