En el aniversario número 76 de la fundación de Corea del Norte, su líder supremo, Kim Jong Un, le envió un mensaje severo a los Estados Unidos y lo tildo de “grave amenaza” para el país norcoreano en el día nacional que se celebró en Pyongyang.
En esta alocución, Kim Jong Un, mencionó que la capacidad nuclear y armamentista de la República Popular de Corea del Norte se debe perfeccionar y estar preparados para un posible ataque por parte del bloque de los Estados Unidos que, según el dictador, representa una grave amenaza para su país.
Ante esta situación, el gobierno de Jong Un dice que Corea del Norte es un Estado con “armas nucleares responsables” y que su arsenal no representa ningún tipo de amenaza para nadie, pues solo está diseñado para defenderse de la intimidación de Washington y sus posibles aliados en un conflicto bélico.
El problema con los Estados Unidos no es nuevo, pues desde el pasado mes de julio, el gobierno norcoreano había protestado por una “directriz de defensa” que ha mantenido el Gobierno de los Estados Unidos con Corea del Sur. El gobierno de Kim Jong Un, dice que estos países están tramando un plan para invadir su país y acentuarse en el poder.
Desde el 2022, Corea del Norte viene adelantando un tipo de pruebas que llama: “Ensayos de Invasión”, en los cuales se preparan para defenderse de posibles ataques tanto de Corea del Sur como de Estados Unidos. Por su parte, el gobierno surcoreano afirma que Corea del Norte tendría planeado hacer pruebas con misiles balísticos internacionales en la previa de las elecciones que se celebrarán el próximo 5 de noviembre en los Estados Unidos.
El Rodong Sinmun, periódico norcoreano oficial del Partido del Trabajo de Corea, público el pasado domingo una foto del dictador Kim Jong Un, dándole un vistazo a un vehículo de lanzamiento de misiles de 12 ejes. Este vehículo sería más grande que el actual Hwasong-17, quien tiene un total de 11 ejes y es conocido por ser el más grande de Corea del Norte.
En otras ocasiones, a Corea del Norte también se le acusó de tratar de iniciar una guerra ambiental ante su vecino, Corea del Sur, por medio de globos aerostáticos que contenían basura y se lanzaban para generar todo tipo de malestar en el lado de los surcoreanos.