Las autoridades rusas acusaron inmediatamente a Ucrania del asesinato cerca de Moscú de Daria Duguina, hija de un conocido intelectual cercano al Kremlin, pero esa hipótesis, si bien posible, es considerada improbable por expertos en inteligencia occidentales.
Duguina, muerta el sábado en la explosión de un coche bomba, era hija del ultranacionalista Alexander Duguin, ardiente defensor de la invasión de Ucrania por las fuerzas rusas.
Kiev rechazó las acusaciones del servicio de inteligencia ruso, según el cual una agente ucraniana fue enviada para eliminar a la periodista de 29 años y después huyó a Estonia.
“¿Podríamos introducir 400 gramos de TNT en Rusia? En teoría, sí. ¿Podríamos poner una bomba? Sí”, asegura un responsable de alto rango de la inteligencia ucraniana a la AFP bajo condición de anonimato.
“Pero el verdadero asunto es, ¿con qué beneficio? Nadie en Ucrania sabe realmente quién es Duguin. ¿Quién tendría algo en contra de su hija? Matarla no tendría ningún sentido”, afirma la fuente.
Desde que Rusia se anexionara la península de Crimea en 2014, Ucrania ha tenido tiempo de desarrollar una red clandestina efectiva en Rusia en previsión de futuras tensiones, afirman los especialistas.
“Creo que desde marzo hay una estructura instalada en Rusia, una estructura logística y (...) operacional”, afirma Gérald Arboit, experto en inteligencia del Conservatorio Nacional de Artes y Oficios (CNAM).
Y aunque no descarta la implicación de Ucrania, que podría haberse producido con ayuda de grupos de oposición rusos, “para este tipo de ataques tienes que hacer un reconocimiento, seguir (al objetivo) y hacer venir a un equipo” que se encargue de poner la bomba. “Una persona sola no puede hacerlo todo”, recuerda este experto.
Posible pero contraproducente
Infiltrar a agentes ucranianos en Rusia también requeriría eludir a las agencias rusas de inteligencia, presumiblemente en alerta desde el inicio de la guerra.
“El asesinato de Duguina se produjo en Moscú, (un lugar) increíblemente difícil de penetrar para los servicios ucranianos”, considera Colin Clarke, director de investigación del Soufan Center de Nueva York.
Pese a ello, “creo que sería posible. Las fuerzas especiales de élite ucranianas (...) son capaces de llevar a cabo el ataque”, asevera.
Los asesinatos selectivos de objetivos rusos de alto perfil, en particular de una mujer joven, también serían contraproducentes para el presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, que confía en gran medida en la simpatía y la ayuda militar de los aliados occidentales.
“No veo la razón de tal operación para los ucranianos”, afirma Alexander Grinberg, analista del Instituto de Seguridad y Estrategia de Jerusalén. “Y no puedo imaginar a los estadounidenses o británicos permitiéndoles hacerlo”, agregó.
Clarke coincide en que si Ucrania quisiera asesinar a un ruso de alto perfil, Daria Duguina no sería su elección.
“Todavía sospecho que fue otra entidad, incluso que fuera un trabajo desde dentro”, dice.
Escepticismo
Los expertos también destacan que el asesinato de la hija de un partidario del presidente ruso Vladimir Putin, pero no necesariamente muy influyente, serviría a la causa del hombre fuerte del Kremlin, exacerbando una indignación popular que se traduzca en mayor apoyo a la guerra.
“No excluyo que Duguina fuera asesinada por los rusos para intensificar la guerra en Ucrania, potencialmente con armamento no convencional”, como bombas termobáricas, afirma una fuente de inteligencia francesa contactada por AFP.
En todo caso, las acusaciones rusas no tienen base, opina Alexandre Papaemmanuel, profesor del Instituto de Estudios Políticos de París (SciencePo) y experto en inteligencia, que desconfía de la rapidez con que se presentó la narrativa rusa.
“Generalmente, para un asesinato político, las investigaciones tardan mucho más en dar resultados”, señala, en relación a la teoría de la agente ucraniana.
Nathan Sales, consejero de inteligencia de Soufan Group, prefiere no elucubrar sobre este caso concreto, pero reconoce su “escepticismo” sobre la versión rusa.
“Sabemos que el régimen de Putin ha asesinado en el pasado a ciudadanos rusos en beneficio de su retorcida agenda política doméstica y exterior”, dice.
*Con información de AFP