Lo que Eilish Poe pensaba que sería un romance de verano terminó siendo una pesadilla con todo y fantasma incluido, aunque este último la ayudó a sobrevivir.
La joven estadounidense de 25 años contó su extraña experiencia con el más allá en el podcast Otherworld, especializado en esos temas.
Poe, quien trabaja como profesora escolar en Colorado, afirma que siempre fue muy clara con Jonathan Crossley acerca de que su amorío era para ella algo pasajero.
Sin embargo, él se negó a aceptarlo, en tanto que ella se mantenía firme en su resolución.
Crossley, siguió relatando, se volvió cada vez más intenso, a pesar de los esfuerzos de ella por mantenerse a distancia.
“Él no se iba a ir. Siguió dejándome mensajes de voz en los que me decía: ‘Te amo, no te voy a dejar ir’”, conto Poe, lo cual, afirmó, la dejaba “asustada”.
En noviembre de 2020, Crossley se introdujo en la casa de ella en Colorado, pero no la encontró, así que decidió esperarla escondido por 26 horas.
Cuando la profesora llegó y fue a ver cómo estaba un conejito que tenía de mascota, su enamorado la emboscó.
“Me arrojó por las escaleras, me golpeó muy fuerte en la espalda -todavía tengo heridas y trauma por eso-. Me tomó por la espalda halándome el pelo, que en ese tiempo lo tenía muy largo. Golpeó mi cabeza contra la pared cinco o seis veces”, contó la profesora.
Luego, Crossley la apuñaló unas 16 veces en el cuello, torso y brazos.
En medio de semejante tortura, Poe afirma que empezó a ver un “carrusel de personas” en la puerta del baño que se encontraba a algo más de 6 metros de donde ella quedó tendida en un charco de sangre.
“Mi abuela paterna estaba allí, de pie”, dijo, recordando a su abuela Jeanie, de quien ella no se pudo despedir en 2014 cuando murió. “Solo me sonreía de una manera muy particular. No me saludó con la mano ni nada por el estilo”, añadió Poe.
Luego, su abuela se desvaneció y apareció Vicky, quien había sido su mejor amiga en el bachillerato y había muerto a se había suicidado a comienzos de 2020.
“Tengo la imagen de lo que tenía puesto tan clara como un cristal. Ella estaba también de pie y, lo mismo que Jeanie, tenía esa sonrisa consoladora en la cara”, prosiguió Poe.
La maestra contó que, tres años después, sigue lamentando la muerte de su amiga. “No importa que solo fueran 5 segundos o lo que hubiera durado, verla otra vez se sintió como un regalo de tiempo extra”.
Pero hubo otra persona más que se le apareció en esos angustiosos momentos, Alyssa Burkett, una mujer que había sido asesinada con disparos y puñaladas por su expareja en Texas, de donde es oriunda Poe.
La maestra asegura que fue realmente Burkett quien la levantó y la ayudó a sentarse, lo cual la salvó porque le permitió tomar el teléfono para llamar y pedir ayuda.
“Mucha gente me ha dicho: “eso fue solo tu cerebro ayudándote a sobrevivir, o un ángel, pero lo que te digo es que lo que vi fue tan real como una persona viva en la sala, no era fantasmal”, anotó Poe.
En cuanto a Crossley, su agresor, se tiró por un acantilado y murió.
Luego del ataque, Poe debió ser sometida a 10 operaciones, en lo cual la ayudaron personas que hicieron sus donaciones a través de una campaña por las redes sociales que recaudó más de 66.000 dólares.
Pero sus experiencias con seres del más allá no concluyeron el día en que se salvó de la muerte.
En el podcast también contó que, desde entonces, ha seguido ese tipo de experiencias de personas en al sombra “de 50 a 100 veces”.
“Nunca se me acercan, aparte de una vez y, en el momento en que yo comencé a caminar hacia la imagen para reconocerla, se fue”, narró.
Agregó que le parece que todo eso le sucedió porque, dada la gravedad de las heridas, ella casi atravesó la frontera entre la vida y la muerte y, “quizá estas personas están en medio de ese cruce, de algún lugar, y por eso puedo verlas”, concluyo la profesora Poe.