Tal parece que para delinquir no hay exclusión de edad. Así quedó evidenciado en el Estado de Misuri (Estados Unidos), donde por tercera vez las autoridades sorprendieron a una mujer de la tercera edad intentando robar una entidad bancaria.

El insólito caso se presentó cuando Bonnie Gooch, como fue identificada la mujer, arribó a una entidad financiera en Pleasant Hill, según reseñó el medio Fox 4 News.

Bonnie Gooch, tiene 78 años. | Foto: A.P.I.

La presunta delincuente, de 78 años, fue sorprendida por los trabajadores del banco intentado cometer un asalto. La situación de inmediato fue reportada ante las autoridades, quienes recibieron las características Gooch y el carro en el cual se movilizaba.

“Obviamente, fue una situación tensa, pero cuando las manos de una anciana salen del auto y es quien conduce el vehículo sospechoso, es un poco impactante”, dijo al medio en mención el jefe de la Policía de Pleasant Hill, Thomas Wright.

En medio de la inspección, los uniformados se percataron que Bonnie Gooch registraba varios antecedentes judiciales por el mismo delito, robo a bancos. Los hechos se habrían presentado en 1977 y 2020, en este último fue condenada a prisión, pero se le otorgó libertad condicional, que expiró en noviembre de 2021.

Según un documento judicial, publicado por medios internacionales, tras la condena el hijo de esta mujer dijo que su madre “estaba loca” y que había salido de su casa “enojada, diciendo que iba a robar un banco”.

Sin embargo, para la policía la septuagenaria es “muy astuta. Ella tenía puesta una máscara tipo N95. Gafas de sol y guantes de plástico”, agregó Thomas Wright y señaló que la táctica de la mujer para distraer a los empleados y cometer el hurto es entregar una nota.

El hijo asegura que la mujer está loca. | Foto: Getty Images

Por este último robo, registrado el pasado miércoles 5 de abril, Bonnie Gooch fue nuevamente acusada del delito de robo a bancos y deberá pagar una fianza de 25.000 dólares ($113.662.200 en moneda colombiana aproximadamente) en efectivo.

Muertes de menores por arma de fuego han crecido

La cifra de menores de edad muertos por arma de fuego en Estados Unidos han aumentado un 50 por ciento entre 2019 y 2021, según el análisis del Pew Research Center de los datos de mortalidad publicados por los Centros de Control y Enfermedades (CDC).

En 2019, antes de la pandemia de coronavirus, se registraron 1.732 muertes por arma de fuego entre menores de 18 años en todo el país, mientras que en 2021 había aumentado hasta 2.590.

La tasa de muertes por arma de fuego de menores, es decir, teniendo en cuenta la población, ha aumentado de 2,4 muertes por 100.000 menores residentes en 2019 a 3,5 por 100.000 en 2021, un crecimiento del 46 por ciento.

En un 50% han aumentado las muerte violentas de niños en Estados Unidos. | Foto: Steve Debenport

Tanto la cifra como la tasa de menores muertos por arma de fuego en 2021 suponen el récord al menos desde 1999, el primer año del que se disponen datos de mortalidad infantil por esta causa en los CDC, destaca el estudio de Pew.

La cifra de muertos por arma de fuego entre la población en general también ha aumentado. En 2019 hubo 39.707 muertes registradas y dos años después eran 48.830, un 23 por ciento más.

Los datos revelan además que el homicidio es la principal causa de muerte por arma de fuego entre menores de 18 años en 2021, ya que suponen el 70 por ciento del total.