Un hecho increíble ha sorprendido a una familia de Edimburgo esta semana y tiene que ver con un mensaje que no esperaban encontrar bajo las tablas del piso de su propia casa.

Fue Eilidh Stimpson, una madre de familia que quiso mover un calentador de un lado a otro de su casa y contrató un plomero para esta labor. El trabajador inició rompiendo parte del piso y después de hacer un agujero en el suelo bajó las escaleras para contarle a la dueña de casa que había encontrado algo asombroso.

Se trataba de una botella de whisky vacía que estaba escondida bajo el suelo de la casa y dentro del envase se encontraba una antigua nota. La señora Stimpson decidió esperar a sus dos hijos para abrir la botella y descifrar qué era lo que tenía adentro.

La mujer fue por sus hijos a su escuela y en el camino a casa les contó que les tenía una sorpresa, ellos pensaron que era algo de comer, pero seguro fue más emocionante que eso.

“Mi hijo de 8 años está en P4 (cuarto grado) y en realidad está aprendiendo sobre los victorianos en este momento, lo cual es genial. Tratábamos desesperadamente de sacar la nota con pinzas y alicates, pero comenzó a rasgarse un poco. No lo hicimos. No quiero dañarlo más, así que lamentablemente tuve que romper la botella” dijo Eilidh al programa Edinburgh Live.

Se trataba de una botella de whisky vacía que estaba escondida bajo el suelo de la casa y dentro del envase se encontraba una antigua nota | Foto: Foto: Eilidh Stimpson/via Edinburgh Live Twitter/@EdinburghLive_

Al sacar la carta de la botella de whisky, los hijos emocionados y la madre sorprendida pudieron leer el mensaje que contenía: “James Ritchie y John Grieve pusieron este piso, pero no bebieron el whisky. 6 de octubre de 1887. Quien encuentre esta botella puede pensar que nuestro polvo está volando a lo largo del camino”.

Un amigo de la familia, asombrado por la historia que le contó Eilidh, decidió emprender la búsqueda de los autores de la nota y su historia, finalmente encontró a los dos hombres con el mismo nombre que vivían en el área de Newington en la década de 1880.

“Hemos sido increíblemente afortunados, y me alegra que todos piensen que es tan interesante como nosotros. Se siente muy bien tener una noticia positiva en medio de todo este pesimismo que hay en este momento”, aseguró la señora Stimpson.

La mujer también aseguró que está pensando en preservar la nota y hacer una propia junto a su familia para que las generaciones futuras la descubran y se sorprendan de igual forma como ellos lo hicieron.

Por su parte, el plomero, Peter Allan, aseguró que aunque el suceso fue un poco extraño: “Donde hice el agujero en el piso, es exactamente donde se encontraba la botella, lo cual es una locura y muy al azar”, aseveró.

Otro mensaje oculto en el río Yazoo

Otro hecho similar ocurrió hace un par de meses cuando en un astillero en el río Yazoo, en Vicksburg, en el estado de Mississippi, un trabajador de la empresa Big River Shipbuilders, Billy Mitchell, encontró una botella verde que estaba abandonada sobre una barcaza.

Dentro de la botella encontró un papel en el que, pese al desgaste del tiempo y de la humedad, todavía era posible leer el mensaje que escribió un niño hace 33 años como parte de un proyecto escolar. La botella fue arrojada al río Tallahatchie y recorrió 295 millas de río por el delta del Mississippi hasta llegar a las manos de Billy Mitchell.

Por eso, decidió publicar una foto en Facebook en busca de pistas, según relata el portal de Telemundo. La publicación tuvo éxito, ya que alguien alertó al doctor Eric Dahl, de Oxford, apuntando que podría ser su hijo quien escribió el mensaje en la botella.

Efectivamente, fue su hijo Brian Dahl quien escribió el mensaje en la botella cuando tenía 11 años. Pero desafortunadamente murió en 2009, cuando tenía 29 años. “Es asombroso que haya sucedido. Recibimos un mensaje 33 años después de que Brian lo pusiera en el río”, aseguró su padre tras reconocer el nombre y la letra de su niño.