Kelsey Foster es una mujer de 29 años de edad que vive en Nueva Gales del Sur y ha sorprendido por una historia que le está dando la vuelta al mundo. La ciudadana casi pierde la vida después de tener por más de dos meses un tampón en su cuerpo.
De acuerdo con el testimonio que le entregó al medio local News.com.au, a o largo de su vida ha experimentado diferentes problemas en su cuerpo, por lo que ciertas molestias o dolores ya no le solían generar mayor preocupación. La mujer explicó que dentro de sus afecciones se encontraba la endometriosis que, según el portal de salud Mayo Clinic, es un trastorno doloroso en el cual el tejido similar al que recubre el interior del útero crece fuera de este.
En un principio, ella empezó a sentir fuertes dolores y calambres, los cuales le debilitaban el cuerpo. Sin embargo, asoció este malestar a su enfermedad y por ello decidió ignorar lo que sucedía.
Foster afirmó que el dolor nunca se alivió, sino que se volvió cada vez más constante, situación que la obligó a visitar urgencias para verificar qué era lo que estaba pasando con su cuerpo, pero en ese momento los trabajadores de la salud no pudieron dar un diagnóstico precisó. “Se descubrió que tenía cálculos biliares y luego se me colapsó la vesícula. Mi hígado también mostró signos de irritación”, dijo.
Para su fortuna, pocos días después su cuerpo expulso un tampón mientras se encontraba en el baño, algo que por supuesto la dejó sorprendida. “Sentí que algo salía de mí, pensé que era un coágulo más, algo que me pasa mucho, pero era un tampón viejo”, precisó.
La situación generó temor en la mujer, que decidió guardar el tapón y llevárselo rápidamente a los médicos, ya que intuyó que esto podría estar relacionado con su malestar. Tras revisar el dispositivo menstrual, los trabajadores de la salud le confirmaron que tenía el síndrome de shock tóxico (SST), algo que también comprobaron con algunas pruebas y que por poco acaba con su vida.
“Hay señales de que se están apagando mis órganos, pero lo estamos tratando. El shock tóxico puede matarte en cuestión de días, tuve mucha suerte de que no hubiera llegado a esa etapa”, comentó.
De acuerdo con Medline Plus, sitio de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, el SST es causado por una toxina producida por algunos tipos de bacterias estafilococos. Esta situación puede generar daños en los órganos, shock y, en el peor de los casos, muerte.
Foster manifestó que probablemente olvidó el tampón debido al estrés que le estaban generando ciertas situaciones de su vida cotidiana y a que tuvo que realizarse exámenes en el hospital, un descuido que por poco la lleva a la muerte.
La situación que está viviendo la ha llevado a reflexionar sobre muchos aspectos de su vida, razón por la que decidió compartir su historia para generar conciencia en las mujeres sobre la importancia de estar atentas a los productos de este tipo.
“Honestamente, me sorprende que los tampones sean incluso legales sabiendo que pueden causar esta infección bacteriana que es tan mortal”, expresó. Asimismo, le sugirió al género femenino que establezca un recordatorio a la hora de utilizar los productos sanitarios, pues no le gustaría que alguien más pase por su misma situación.
Por ahora, Kelsey permanece bajo supervisión médica super estricta mientras recibe el tratamiento para poder controlar lo más proto posible la infección.
Medline Plus indica que algunas formas para disminuir el riesgo de sufrir este problema son evitar el uso de tampones altamente absorbentes o cambiar este producto con más frecuencia.