La atención internacional ha estado centrada, durante las últimas horas, en el opositor venezolano Juan Guaidó, quien tuvo que salir de Colombia horas después de haber arribado con el propósito de participar en encuentros, en el marco de una cumbre internacional sobre el vecino país. Sin embargo, desistió de su permanencia y partió rumbo a Miami, Estados Unidos.
Ese martes 25 de abril, tras llegar al país norteamericano, el expresidente interino de Venezuela aseguró estar con intranquilidad por su familia y afirmó que esta había recibido amenazas. También dijo que la persecución de la “dictadura” oficialista se percibió en suelo colombiano.
“Muy preocupado por mi familia, por mi equipo de trabajo que ya han visto las consecuencias de una dictadura: torturados, perseguidos y en este momento amenazados directamente (...). Han recibido llamadas amenazantes (...). También debo decir que la persecución se sintió en Colombia también, de alguna manera”, puntualizó.
“No se lo vamos a permitir”
En declaración a periodistas, y respecto a su repentina salida de este país, Guaidó se limitó a decir que la primera notificación con la cual decidió partir la recibió abiertamente. “Ustedes vieron públicas las amenazas del canciller. Ahora mi expectativa con eso es sencilla: que los países que están ahí hablen en nombre de los derechos humanos de los venezolanos”, continuó.
“Que alcen la voz, esa que Maduro me quería quitar y no se lo vamos a permitir”, dijo quien en su momento asumió la presidencia interina del vecino país en enero de 2019, pero que le fue retirada a finales del año pasado (con 72 votos a favor y 29 en contra).
Poco antes de partir hacia Miami, el exmandatario hizo hincapié nuevamente en que las amenazas a su círculo cercano lo habían obligado a tomar ese vuelo, pero ello no significaba el fin de su “lucha” por unas elecciones libres y transparentes. Esto de cara a las primarias convocadas por la oposición para el 22 de octubre de este año y que definirán quién se medirá con Nicolás Maduro por el Palacio de Miraflores.
Denunció expulsión de Colombia
Las amenazas “no nos van a detener. Hoy con más fuerza que nunca, con la certeza de que vamos a ver recuperado a nuestro país y también con el respeto, por cierto, de la normativa interna. Espero que las instituciones de Colombia y los países en esa cumbre puedan hablar de la democracia y el respeto a los derechos humanos, de la integridad de quienes están siendo perseguidos no solamente en Venezuela sino en todo el mundo”.
Ni Juan Guaidó ni tampoco Nicolás Maduro habían sido invitados al encuentro que se dispuso para esta jornada con representantes de una veintena de países, entre ellos Estados Unidos. La Cancillería Colombiana precisó que el expresidente interino estaba en la nación de forma “irregular” y que Migración lo condujo al Aeropuerto El Dorado para verificar su salida hacia Estados Unidos.
El Ministerio de Relaciones Exteriores agregó que el vuelo había sido comercial. “Migración Colombia se encuentra atenta a que ese viaje se produzca sin dilación alguna”, se lee en la cuenta de Twitter del organismo.
Antes de conocerse las dificultades para su permanencia, Guaidó había confirmado que pediría encuentros con las representaciones partícipes en la conferencia internacional. Además, centró parte de sus palabras en que seguiría denunciando los “crímenes de lesa humanidad” de los que responsabiliza al oficialismo.
En la región, Colombia fue uno de los mayores aliados del mandato interino de Guaidó, bajo la administración de Iván Duque, quien había roto relaciones con Nicolás Maduro.