El Salvador completó a finales de marzo su primer año bajo un estado de excepción que ha generado, por meses, opiniones divididas sobre su alcance. El miércoles 12 de abril el Congreso aprobó una extensión de la medida a continuar desde el 17 de ese mes hasta el 16 de mayo, tras recibir el respaldo de 67 legisladores.

A poco de cumplir cuatro años desde que asumió funciones el presidente, Nayib Bukele, ha resaltado como una de sus principales políticas la lucha contra las pandillas. Justamente, en el marco del régimen de excepción, la aprehensión de presuntos delincuentes continúa al alza.

En la jornada anterior el Ministerio de Seguridad confirmó que la cifra de presuntos pandilleros tras las rejas ya superó la barrera de los 68.000. “Resultados contundentes gracias a las estrategias de seguridad implementadas por el Presidente @nayibbukele”, se lee en la publicación del organismo oficial. A esta cifra se suma la incautación de 2,718 armas de fuego, 16,510 dispositivos celulares y 3,614 vehículos.

¿Cuál es el balance de homicidios?

La Policía salvadoreña afirmó que este jueves 4 de mayo el país había cerrado con cero homicidios, igual que el día inmediatamente anterior. También aseveró que constantemente los uniformados tenían presencia en colonias y comunidades

Patrullajes de la Policía salvadoreña, en aras a disminuir los hechos delictivos. | Foto: Policía de El Salvador / Twitter @PNCSV

“Cerramos filas a las pandillas y velamos por el descanso de la población (…). A nivel nacional, nuestros agentes mantienen patrullajes, es por eso, que la población retorna con tranquilidad a sus hogares(…). Con el #CercoSoyapango las zonas comerciales ahora tienen vida nocturna. Por años estas familias vivieron amenazadas, pero hoy pueden transitar libremente de un municipio a otro”.

Abril de este año es el primer mes con el cual la nación centroamericana pudo hacer una comparación de su estrategia respecto a 2022. “Los logros en seguridad son inéditos en la historia moderna de la humanidad”, destacó Bukele en su cuenta de Twitter.

Mientras su gobierno sigue ‘presumiendo’ resultados en su política de seguridad, el Observatorio Universitario de Derechos Humanos de El Salvador (OUDH) exhortó a mediados del mes pasado a la Asamblea Legislativa para terminar con el estado de excepción. “El régimen ha caracterizado el año 2022 por llevar al Estado salvadoreño a su versión más represiva de las últimas décadas”, dijo el coordinador de ese grupo, Jorge Rodríguez, según AFP.

Panorama en Honduras y Costa Rica

En la región, Honduras ha empezado a ‘seguir los pasos’ de su país vecino para reducir los índices de criminalidad. En ese sentido, este jueves 4 de mayo aprobó ampliar, por cuarta vez, la restricción a las libertades consagradas en la carta magna. Lo anterior, en el marco de hechos delictivos como el incendio de un bus, presuntamente por pandillas.

El gobierno hondureño (encabezado por la presidenta Xiomara Castro) respalda el estado de excepción. | Foto: Restringido

“Decretar por un período de 45 días la suspensión de las garantías establecidas en (…) la Constitución”, se lee en la iniciativa avalada por los diputados. Inicialmente la medida se aplicó en diciembre del año pasado “en virtud de la grave perturbación de la paz (…) ocasionada esencialmente por grupos criminales organizados”, como las pandillas Barrio 18 y Mara Salvatrucha.

Para el director de la Policía Nacional, Gustavo Sánchez, esa estrategia es la que le ha entregado “un poco más de tranquilidad” a la población. Por su parte, el gobierno de Costa Rica reconoció la problemática por bandas narcotraficantes, pero no contempla replicar la estrategia de Bukele.

El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, descarta implementar por ahora el estado de excepción. | Foto: Restringido

En entrevista con AFP el presidente, Rodrigo Chaves, enfatizó: “lo que hay que hacer es arrancar este problema de raíz” e inicialmente buscar “reforzar las leyes para asegurar que existe una probabilidad de sanción” y evitar el riesgo de impunidad.