Colectivos indígenas de Nicaragua denunciaron la muerte de al menos siete personas del pueblo mayangnas, situado al norte del país, en la localidad Wilú, luego de que grupos armados llegaron hasta la zona e ingresaron a sus casas.

De acuerdo con las declaraciones, la cantidad de “fuertemente armados” fue masiva en contra de la comunidad Wilú. La denuncia indicó que los grupos atacaron a la comunidad, mientras varios hombres defensores se fueron a cazar, lo que, por desgracia, se desencadenó en el asesinato de dos mujeres y cinco jóvenes. Asimismo, secuestraron a dos hombres y dos niños, precisó el Centro de Asistencia Legal a Pueblos Indígenas (Calpi).

En la misma línea, se dio a conocer que los grupos armados quemaron casi en su totalidad todas las casas del pueblo indígena en Nicaragua; solo la infraestructura de la escuela, la iglesia y una casa pastoral quedaron intactas. En efecto, desde el fin de semana muchas familias tomaron la decisión de huir de la localidad, pues, con el paso de los días, temen por su vida.

En el comunicado compartido por Calpi, se consignó que “esta es la segunda vez que la comunidad de Wilú ha sido atacada por colonos sin que las autoridades los hayan protegido”. De manera conjunta, se agregó que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) otorgó medidas cautelares en el primer ataque a la comunidad de Wilú, aunque denunciaron que el Gobierno de Nicaragua hizo caso omiso.

Grupos armados - imagen de referencia. | Foto: Libre de derechos

En otras oportunidades, el colectivo indígena de los mayangnas denunciaron más ataques vinculados con invasión de tierras; de hecho, aseguraron que con las agresiones violentas, pretenden expulsar a los pueblos indígenas de sus hogares ancestrales, luego dar uso a estos terrenos para prácticas ilegales.

Hace un tiempo, la Organización de las Naciones Unidas indicó que pese a que en Nicaragua se adjuntó una ley enfocada en la protección de los derechos de los indígenas y sus tierras, estos grupos ancestrales “siguen enfrentándose a desafíos y presiones debido a las recurrentes invasiones de colonos”. Cabe mencionar que los colectivos indígenas representan el 31 % del territorio nacional.

La dictadura de Nicaragua rompe relaciones con el Vaticano, ¿cuál fue el detonante?

En Nicaragua la dictadura del sandinista, Daniel Ortega, rompió sus relaciones con el Vaticano tras meses en los que las tensiones entre el oficialismo y la Iglesia Católica se han recrudecido. Fuentes cercanas a la Santa Sede le confirmaron a Confidencial la decisión que eleva aún más las tensiones, ya marcadas por recientes choques.

Recientemente el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, lanzó nuevas acusaciones contra la Iglesia Católica. | Foto: AFP (izquierda); AFP / Andreas Solaro (derecha)

Según ese medio, la representante de Ortega ante el Vaticano, Yara Suhyén Pérez Calero, expresó “verbalmente” la decisión de dejar sin efecto el vínculo que venía sufriendo fricciones. El anuncio se conoce poco después de que el papa Francisco relacionara, en entrevista con Infobae, la administración sandinista con “dictaduras comunistas o hitlerianas”.

1 | Foto: Restringido

En ese medio, el sumo pontífice se refirió a las recientes decisiones del país centroamericano como el veto a las procesiones de Semana Santa y el destierro y retiro de la ciudadanía a decenas de opositores. Sus palabras también hicieron alusión a la acusación que hace algunos días hizo Ortega del Vaticano al que señaló de albergar una “mafia” y sobre el que cuestionó que no hubiese una “democracia” para designar a sus miembros.

“Yo ahí, con mucho respeto, no me queda de otra que pensar en un desequilibrio (...). Ahí tenemos un obispo preso (Rolando Álvarez), un hombre muy serio, muy capaz que quiso dar su testimonio y no aceptó el exilio. Son un tipo de dictaduras groseras o para usar una distinción linda de Argentina, guarangas”, respondió el jerarca de la Iglesia Católica.

*Con información de Europa Press.