El sesgo contra las mujeres sigue tan arraigado como lo estaba diez años atrás y la equidad de género va en reversa.
Así lo concluye una nueva entrega del Índice de Normas Sociales de Género, un reporte del Programa para el Desarrollo de las Naciones Unidas (PNUD), del cual también se desprende que 9 de cada 10 personas tienen prejuicios contra las mujeres por el hecho de pertenecer a ese sexo.
La mitad de las personas en 80 países, señala también el informe, creen que los hombres son mejores líderes políticos que ellas y 43 % opinan que sucede lo mismo en el campo ejecutivo y gerencial.
De igual modo, un cuarto de la muestra dijo que le parece bien que los hombres golpeen a las mujeres.
Las información fue recolectada entre 2017 y 2022 y las conclusiones revelan que nada ha cambiado desde que se publicó la edición anterior del índice, que hizo acopio de datos recogidos entre 2005 y 2014.
El director de desarrollo humano del PNUD, Pedro Conceição, expresó al respecto de estos resultados: “Mi expectativa era ver algún progreso, porque, ¿qué puede haber peor que 9 de cada 10 personas tengan prejuicios contra las mujeres (como se vio en la versión anterior)?”.
El politólogo dijo que estaba esperanzado en mejoras en las cifras, dado que durante el periodo medido se dio el movimiento #MeToo y ha habido una mayor visibilidad de la forma en que esos prejuicios afectan a las mujeres.
“Desafortunadamente, hacer este ejercicio ha significado un impacto tras otro. La primera vez que lo hicimos, yo estaba asombrado por la magnitud del sesgo, y esta vez lo estoy por la falta de progresos”, explicó el funcionario.
La investigación puntualizó que los tabúes y preconceptos sobre las mujeres las afectan en los ámbitos laboral, político, de los negocios.
Así mismo, agregó, contribuyen al despojo y la violación de sus derechos humanos.
El informe también muestra la brecha salarial del 39 % entre hombres y mujeres, a pesar de que ellas hoy están mucho mejor educadas y preparadas para desempeñar todo tipo de cargos.
Para Anam Parvez, jefe de investigaciones de la organización Oxfam en el Reino Unido, “esto es verdaderamente alarmante y explica por qué el mundo está totalmente desviado en el objetivo de alcanzar la equidad de género para 2030″.
Igualmente, recordó que en 2021, una de cada 5 mujeres se habían casado antes de cumplir 18 años, 1.700 millones de mujeres y jovencitas vivían con menos de 5.5 dólares al día y que ellas siguen asumiendo tres veces más trabajo doméstico no remunerado que ellos alrededor del planeta”, expresó Parvez.
La especialista expuso que, al ritmo que marcha la situación, se necesitarán 186 años para cerrar las brechas en protecciones legales.
Los resultados del Índice “también explican por qué, si bien ha habido cierto progreso en la promulgación de leyes que promueven los derechos de las mujeres, las normas sociales siguen estando profundamente arraigadas y generalizadas”, señaló la investigadora de Oxfam.
Sin embargo, no todo es malo, de acuerdo con el criterio de Heidi Stöckl, profesora experta en violencia de género de la Universidad Ludwig-Maximilians, en Múnich, Alemania, quien cita algunos signos de progreso, como un incremento en las tasas de educación del género femenino en países como Bangladesh y una mayor representación de las mujeres en los campos de la política y la economía.