“Pobrecitos los criminales, pobrecitos cómo les estamos violando sus derechos en las cárceles; pobrecitos cómo les quitaron las colchonetas..., pero no dijeron nada cuando ellos les quitaron la vida a los salvadoreños”, inicia un reciente video en el que el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, responde a las críticias y defiende las condiciones de los presos en la megacárcel conocida como Cecot (Centro de Confinamiento del Terrorismo), inaugurada a inicios de febrero y a donde fueron trasladados este viernes los primeros 2.000 reclusos.
Las imágenes son impactantes, porque se puede ver la rigurosidad con la que son tratados los presos, que utilizan apenas una pantaloneta blanca de atuendo mientras corren por el penal con sus manos esposadas, algunas veces incluso esposadas a sus pies. Muchas voces han acusado al presidente Bukele de autoritarismo e irrespeto a los derechos humanos.
Varios usuarios en Twitter le han recomendado al presidente revisar el artículo 5 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que dice: “Nadie será sometido a torturas, ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes”, mientras que otras personas han defendido la actitud del salvadoreño, asegurando que los delincuentes no deberían tener los mismos derechos que las personas que no han cometido crímenes.
La respuesta de Bukele
En sus declaraciones Nayib Bukele, de 41 años, y quien ocupa el cargo de presidente de El Salvador desde junio de 2019, ha reiterado su visión sobre la situación: “No dijeron nada cuando ellos le quitaron la tranquilidad a nuestro país, cuando ellos han hecho que corra sangre en nuestro país y cuando ellos han causado, de hecho, que en nuestro país no se desarrolle como debería ser”, asegura con contundencia.
Tras lo cual, el presidente explica como funcionan los mecanismos de extorsión que durante años han implementado las pandillas en El Salvador: “Cada negocio que abre van y le ponen extorsión (las pandillas), o como ellos le llaman, renta, negocios pequeños que tienen que pagar 50, 70, 100 dólares de extorsión a esos vagos, que lo único que hacen es matar, amedrentar y asesinar”, dice Bukele.
Los pagos de las familias de los presos
El medio Infobae conversó con familiares de presos, organizaciones civiles y otros defensores de los derechos de los presos, quienes llegaron a una misma conclusión: la administración actual estaría cobrando por el suministro de artículos básicos como papel higiénico, alimentación y ropa, en distintos penales, en donde se encuentran recluidos los más de 60.000 salvadoreños que han resultado detenidos desde que se instauró el régimen de excepción, hace cerca de un año.
Este ha sido otro de los motivos por los cuales el presidente Bukele ha sido criticado. El temor de algunos allegados a los prisioneros es que el cobro que estaría teniendo lugar en el penal de máxima seguridad de Zacatecoluca y otros dos centros más, se convierta en obligatorio. Las fuentes consultadas por ese medio estiman que el requerimiento empezó a tomar fuerza desde finales de 2022.
Se trata de paquetes con valores discriminados en varias categorías, cuya suma da un total de 170 dólares (casi 835.000 pesos colombianos). Este valor compila al menos cinco paquetes: alimentación, higiene hombre, misceláneo, vestimenta hombre y limpieza de área, siendo la tercera de estas la de mayor precio: 70 dólares.
El problema para muchos familiares de presos es que son ellos quienes asumen los costos, aunque por ahora en la mayoría de las cárceles se permite el ingreso de artículos comprados en otros sitios.
“Son malas noticias, ahora no nos recibirán paquetes, hay que comprarlo en el penal (...). Es mucho dinero, ya no sé si voy a poder llevar (...). Lo que nos han dicho es que la idea que tienen es que sea en todas las cárceles”, declaró la mamá de un recluso.