Cuando el profesor John Altamirano, de Palmira, Valle del Cauca, viajó a China por temas laborales en agosto del presente año, jamás se imaginó que viviría un verdadero viacrucis en ese país, pues desde que llegó a esa nación completa más de tres meses confinado por cuenta del coronavirus.
El docente contó a Blu Radio que viajó a China para trabajar en una escuela internacional. Aunque se realizó varias pruebas para de detección de coronavirus, al llegar a ese país debió realizarse una prueba más, la cual dio positivo.
Desde ese momento, el hombre cuenta que empezó a vivir un drama que lo ha mantenido durante tres meses encerrado en hoteles y hospitales cumpliendo cuarentenas, teniendo en cuenta que las medidas en ese país asiático son bastante estrictas.
Aseguran que una vez un ciudadano da positivo para coronavirus se debe dirigir a un hospital y permanecer allí hasta que sea negativo. Posteriormente, es obligado a mantener una cuarentena que dura 15 días en un hotel y después estar encerrado en su vivienda durante otros siete días más.
El encierro es tal, dice el docente, que desde que llegó a ese país no ha “pisado un andén”, y que no ha visto el sol. Después de completar más de 30 pruebas para detectar el coronavirus, una de estas volvió a dar positivo, razón por la que nuevamente está en un hospital.
“Duré en el hospital cerca de dos meses, me hicieron un poco más de 21 pruebas. No me ha dado ni dolor de cabeza, ni un síntoma de covid-19, pero las pruebas las realizan cada tres días. Esas pruebas daban positiva, negativa, positiva, negativa y así (...) hasta que no me dieran dos pruebas negativas consecutivas no me dejaban salir (...) La séptima prueba me dio positivo (...) Y aquí estoy, nuevamente sufriendo en el hospital hasta quién sabe cuándo. Me han tenido que dar comida enlatada porque no estoy muy acostumbrado a la comida tradicional china que dan en el hospital. Pero acá sigo”, contó Altamirano.
Además, narró que, por fortuna, la escuela donde llegaba a trabajar en China se ha encargado de sus gastos médicos con ayuda del seguro.
A propósito del caso anterior, el pasado viernes cientos de vuelos fueron cancelados, algunas escuelas cerraron y viajes organizados quedaron suspendidos tras la detección de tres casos de coronavirus en Shanghái, muestra de la estricta estrategia anticovid que continúa vigente en China.
Las autoridades sanitarias de Shanghái indicaron en ese momento que los tres positivos son amigos que viajaron a la ciudad cercana de Suzhou la semana anterior y que los tres estaban completamente vacunados.
Por lo tanto, alrededor de 500 vuelos programados en los dos grandes aeropuertos de Shanghái fueron cancelados el viernes.
El gobierno municipal obligó también a la suspensión de todos los paquetes de viajes organizados entre provincias que pasaran por esta ciudad de alrededor de 25 millones de habitantes. Seis hospitales de la ciudad suspendieron los servicios de pacientes externos.
Además, todas las escuelas cerraron en la pequeña ciudad satélite de Xuzhou tras encontrarse allí un contacto estrecho de uno de los positivos de Shanghái.
“China ha acumulado mucha experiencia en la ‘dinámica covid cero’, con lo que nuestra estrategia no cambiará”, dijo Zhang Wenhong, jefe del equipo de prevención de la covid de Shanghái.
Cabe destacar que las autoridades chinas están en alerta máxima ante cualquier brote en la antesala de los Juegos Olímpicos de Invierno que se llevarán a cabo del 4 al 20 de febrero de 2022, donde habrá un flujo de atletas extranjeros, medios y autoridades.