La segunda tanda de documentos desclasificados relacionados con el caso del multimillonario Jeffrey Epstein, acusado de pedofilia y tráfico de menores, y que llegó a codearse con grandes personalidades, muestran en más de 300 páginas la forma en que captaba a adolescentes para llevarlas a su residencia en Florida, Estados Unidos.
Estas descripciones se basan en la investigación llevada a cabo por el exdetective de la Policía de Palm Beach Joseph Recarey, quien llegó a entrevistar a 33 mujeres, la mayoría de ellas menores de edad y sin ninguna experiencia en masajes, a las que además se les pedía invitar a amigas para “pagos adicionales”.
Una de las menores implicadas aseguró que en aquel momento no asumía ni tenía expectativas sobre ninguna actividad sexual y que Epstein le quitó la ropa sin su consentimiento cuando lo conoció, según ha publicado la cadena de televisión estadounidense CBS News.
Estos documentos, cuya primera tanda fue desclasificada el pasado miércoles 3 de enero, y de los que se esperan más difusiones en los próximos días, son los primeros en publicarse con relación al mencionado caso, que podrían incluir hasta 200 nombres, entre los que se encontrarían tanto acusadores de Epstein, empresarios destacados y figuras políticas, aunque su mención o aparición no implica que hayan cometido algún delito.
A pesar de que parte de esta información ha sido publicada por diferentes medios de comunicación a lo largo del tiempo, es la primera vez que aparece reflejada en documentos oficiales, que recogen declaraciones, correos electrónicos y otro tipo de documentos.
Según el diario La Razón citando a CBS News, el abogado le preguntó al exdetective Joseph Recarey: “Y al final de ese masaje, si esa víctima traía a otras amigas, ¿le pagarían por el reclutamiento de esas amigas?”. “Correcto”, respondió Recarey.
También el abogado le habría preguntado al expolicía: “Entonces, ¿determinó que ‘masaje’ era en realidad una palabra clave para otra cosa?”. La respuesta de Recarey fue: “Cuando iban a realizar un masaje era para gratificación sexual”.
Los documentos desprecintados el jueves incluían un extracto de la declaración de una de esas víctimas, una joven que estudiaba la secundaria cuando fue a la casa de Epstein, pensando que la habían contratado para darle un masaje.
“No recuerdo exactamente cómo me propusieron ir. Simplemente, estaba allí y, de repente, me ocurrió algo horrible”, dijo, y añadió que Epstein le quitó la ropa sin su consentimiento la primera vez que se encontró con él.
Dijo que había trabajado “muy, muy duro” a lo largo de los años para olvidar los detalles de sus encuentros sexuales.
La víctima, cuyo nombre permanece bajo precinto, dijo que una compañera de la escuela le había sugerido el trabajo. Más tarde se enteró de que las chicas que recomendaban a otras chicas a Epstein recibían pagos.
Los expedientes que se están desprecintando formaban parte de una demanda presentada por una de esas víctimas, Virginia Giuffre, contra Ghislaine Maxwell, quien fue pareja de Epstein, administradora de su casa y principal reclutadora de mujeres jóvenes y vulnerables. Esa demanda se resolvió en 2017, pero los documentos del caso siguen publicándose años después.
La mayoría de los nombres que figuran en esos archivos resultan familiares a cualquiera que haya seguido de cerca el escándalo.
Fue durante el juicio penal de Maxwell, hace dos años, cuando las víctimas de Epstein, algunas de las cuales aspiraban a ser modelos o artistas, describieron cómo soltaba los nombres de sus amigos famosos e influyentes para insinuar que él era el conducto para que las víctimas alcanzaran sus sueños. Maxwell, de 62 años, fue declarada culpable de cargos de tráfico sexual y está cumpliendo una condena de 20 años de prisión.
*Con información de Europa Press y Associated Press.